El ministro de Educación de la Nación, Alberto Sileoni, junto a sus 24 pares de todo el país, anunció ayer que hubo consenso para que el ciclo lectivo 2013 comience el 25 de febrero, con el objetivo de garantizar los 190 días de clase.
inicia sesión o regístrate.
El ministro de Educación de la Nación, Alberto Sileoni, junto a sus 24 pares de todo el país, anunció ayer que hubo consenso para que el ciclo lectivo 2013 comience el 25 de febrero, con el objetivo de garantizar los 190 días de clase.
“Este año, desde el Estado nacional, volvimos a convocar a las provincias a asumir la meta de los 190 días. De esta manera, renovamos el compromiso que planteamos en 2011 y fue aprobado por el Consejo Federal de Educación”, dijo Sileoni en el marco de la XLVI Asamblea que reúne a los titulares de las carteras educativas de todo el país, que se realizó ayer en la sede del Palacio Pizzurno, en Capital Federal.
A su vez, Sileoni consideró: “El consenso alcanzado respecto de esta iniciativa se basa en la decisión, compartida por todos los ministros de Educación, de seguir profundizando el camino que venimos transitando para garantizar que cada año haya más días de clase”.
“Establecer un piso de 190 días de clases forma parte de un proceso y de un conjunto de políticas destinadas a seguir mejorando los aprendizajes: más días, más horas, la distribución de netbooks y libros, la construcción de escuelas, la mejora de los salarios”, reivindicó el ministro.
Por otra parte, Sileoni enfatizó que “para aquellos que nos piden calidad respondemos que trabajamos día a día de un modo federal por mejorar la calidad educativa, pero también por la mayor cantidad de días de clases en la Argentina“.
“Con el esfuerzo de las provincias, de la Nación y de las organizaciones gremiales hace ya varios años que venimos cumpliendo el objetivo de los 180 días de clases, fijados por la Ley N 25.864, promulgada en enero de 2004”, destacó.
El 2011 fue el año de mayor cantidad de días de clases de la década, y el ciclo lectivo 2012 “será aún mejor”, anticipó el ministro, minimizando las protestas educativas.