Las familias de las niñas que habrían sido abusadas por el chofer del transporte escolar, solicitarán a la Justicia que cambie la carátula de la causa para que, si en el juicio se comprueba el delito, la pena al acusado sea más elevada.
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Las familias de las niñas que habrían sido abusadas por el chofer del transporte escolar, solicitarán a la Justicia que cambie la carátula de la causa para que, si en el juicio se comprueba el delito, la pena al acusado sea más elevada.
Uno de los dos abogados de las familias de las dos niñas que habrían sufrido un abuso sexual dijo a este medio que pedirá que se cambie la carátula de “abuso sexual simple” a “abuso sexual agravado”.
El caso genera debate porque un informe del CIF (Cuerpo de Investigadores Fiscales) describió a una de las chicas de 9 años como posible “objeto de deseo”.
En la causa se está investigando un abuso sexual simple pero el defensor, de quien se preserva la identidad, consideró que está mal tipificado el ilícito.
“El delito es agravado por el hecho de que el presunto autor es quien tenía la guarda de las niñas cuando las llevaba a clases. Las madres le delegaban el cuidado en ese momento”, explicó el profesional. El abuso sexual tiene penas de hasta 6 años si es simple y de hasta 10 años si es agravado. Si cambiara la calificación, la investigación pasaría del fuero Correccional al de Instrucción.
Además, el representante legal dijo que la Justicia le informó que se había vencido el plazo para que las madres se presenten como querellantes.
También adelantó que solicitaría documentación que demuestre que las familias habían sido debidamente notificadas sobre los plazos.
El profesional cuestionó que se haya entrevistado a las niñas sin utilizar la cámara gesell, un sistema diseñado para tomar testimonios a chicos víctimas o testigos de delitos.
En el polémico informe que elaboró el CIF sobre el caso se concluye sobre una de las niñas que habría sido víctima: “... no se muestra como niña, sino que se ubica más bien en un lugar de mujer, mostrando un cuerpo desarrollado que puede llegar a ser objeto de deseo”. El documento también asegura que la nena relata los hechos “sin mostrar signos de angustia ni sentimientos de culpa”.
La titular del CIF hasta la semana pasada, Gabriela Buabse, no se hizo responsable del reporte y aseguró que lo firmó pero que no lo redactó. “No aceptamos que Gabriela Buabse no se haga cargo del informe que elaboraron”, dijo el defensor de las niñas. La funcionaria fue designada como fiscal penal el jueves.
Solicitan que se declare nulo
el polémico informe del CIF
El otro abogado defensor que interviene en la causa por las menores que habrían sido abusadas denunció ayer en medios radiales que solicitó en la Corte de Justicia la nulidad del informe del CIF, por considerarlo “perjudicial y en desapego a la normativa vigente”. Además consideró que la investigación del CIF “careció de la intervención de profesionales idóneos sobre el abuso de niños”.
El informe se realizó en el marco de una causa en donde dos nenas habrían sido abusadas por el mismo hombre a fines de 2011.
El CIF concluyó que una de las chicas, de 9 años, “se ubica más bien en un lugar de mujer, mostrando un cuerpo desarrollado que puede llegar a ser objeto de deseo”.
Días después del escándalo que hubo por el informe del CIF que señala que una niña podía ser un “objeto de deseo”, Gabriela Buabse, quien era la directora del organismo y firmó el polémico documento, deslindó responsabilidades.