¿Quieres recibir notificaciones de alertas?

18 de Mayo,  Salta, Centro, Argentina
PUBLICIDAD

Los diálogos buscan bajar el tono de la disputa binacional

Viernes, 13 de abril de 2012 01:29

En plena embestida del Gobierno argentino contra YPF, llegó el presidente de Repsol, Antonio Brufau, con el objetivo de llegar a un acuerdo en el conflicto con la petrolera argentina.
Si bien se pensó que sería el hombre clave para poner paños fríos, no fue así. Tras la reunión, el Gobierno español lanzó una dura advertencia.
Pero aún hay una persona que podría frenar la embestida kirchnerista. Se trata de Carlos Zannini, un funcionario de la misma jerarquía que recomendaría que el vicepresidente Amado Boudou renunciara en medio del escándalo por el que atraviesa, o al menos solicite licencia hasta que se dilucide si utilizó o no su condición de funcionario para traficar influencias en beneficio de la empresa exCiccone Calcográfica.
El actual secretario Legal y Técnico es uno de los tres hombres que más escucha la Presidente, detrás de Máximo Kirchner y por delante del titular de la SIDE, Héctor Icazuriaga.
En el caso YPF, el secretario habría comenzado a estudiar mejor la operación y habría encontrado demasiados costados vulnerables desde el punto de vista jurídico, con consecuencias perjudiciales para el gobierno de Cristina y para el Estado.
 

Alcanzaste el límite de notas gratuitas
inicia sesión o regístrate.
Alcanzaste el límite de notas gratuitas
Nota exclusiva debe suscribirse para poder verla

En plena embestida del Gobierno argentino contra YPF, llegó el presidente de Repsol, Antonio Brufau, con el objetivo de llegar a un acuerdo en el conflicto con la petrolera argentina.
Si bien se pensó que sería el hombre clave para poner paños fríos, no fue así. Tras la reunión, el Gobierno español lanzó una dura advertencia.
Pero aún hay una persona que podría frenar la embestida kirchnerista. Se trata de Carlos Zannini, un funcionario de la misma jerarquía que recomendaría que el vicepresidente Amado Boudou renunciara en medio del escándalo por el que atraviesa, o al menos solicite licencia hasta que se dilucide si utilizó o no su condición de funcionario para traficar influencias en beneficio de la empresa exCiccone Calcográfica.
El actual secretario Legal y Técnico es uno de los tres hombres que más escucha la Presidente, detrás de Máximo Kirchner y por delante del titular de la SIDE, Héctor Icazuriaga.
En el caso YPF, el secretario habría comenzado a estudiar mejor la operación y habría encontrado demasiados costados vulnerables desde el punto de vista jurídico, con consecuencias perjudiciales para el gobierno de Cristina y para el Estado.
 

Temen entonces que la operación desencadene juicios internacionales y pronunciamientos de países extranjeros en foros tales como la Cumbre de las Américas o el G-20, entre cuyos países la Argentina ya está cuestionada por las serias restricciones comerciales que impuso en los últimos meses y que valieron una queja profunda en la Organización Mundial de Comercio.
En esta línea, es que Zannini podría tener algunos buscaría la intervención de YPF mediante una expropiación (que debería ser por ley, o mediante la compra de acciones de común acuerdo con la controlante española Repsol), con el principal impulsor, el camporista viceministro de Economía, Axel Kicillof, y contra el ministro, Julio de Vido.
De todos modos Brufau llegó con una agenda clara. Repsol estaría dispuesta a colaborar para superar la crisis energética de la Argentina, pero siempre y cuando Cristina garantice el respeto a las inversiones españolas en el país.
La firma discutiría todo tipo de alternativas: abrir el paquete accionario a una participación estatal, un eventual cambio de la conducción, evaluar la forma de remisión de utilidades y confeccionar un plan de inversión que convoque a las cinco grandes petroleras, Exxon, Total, Shell, Petrobras y Bridas.
Pero Brufau también advirtió que, si continúa el hostigamiento contra Repsol para desvalorizar sus inversiones, el gobierno español está dispuesto a llevar todas las medidas que crea necesarias contra la Argentina en los foros internacionales, incluyendo embargos comerciales y reclamos judiciales.
 

Temas de la nota

PUBLICIDAD