Después de cinco días de competencia hoy se sabrá, a última hora, quién es el campeón de los Juegos Deportivos de la Juventud Trasandinas, en su XIV edición Perú 2012. Si bien el resultado deportivo final importa y mucho, hay que destacar también todo lo que gira alrededor de la competencia como la sociabilidad que se genera entre unos y otros (deportistas, dirigentes, delegados y periodistas) y la experiencia que chicos y jóvenes adquieren dentro de un universo particular y netamente deportivo.
Entre los diversos aspectos que componen una competencia de este tipo, la organización siempre está en la mira de todos. En esta edición peruana de los Judejut las opiniones no son las mejores, todo lo contrario. Demasiadas falencias de manera sistemática opacaron las expectativas previas a la competencia. En el marco de ciudades muy ricas en sus tradiciones, costumbres y culturas, con lugares que conservan la herencia colonial representadas a través de una arquitectura única, la organización deportiva debió estar a la altura y, sin embargo, trascendió más por sus fallas que por sus aciertos.
En el aspecto deportivo Salta presenta mejoras en algunas de sus disciplinas, igual situación de años anteriores en otras y también un retroceso. Vamos por partes. En la sede de Arequipa el básquet femenino superó la actuación del año pasado. Sin siquiera pasar la primera ronda en 2011, perdieron cinco de seis partidos, y este año se metieron en cuartos de final entre los ocho mejores equipos transandinos. En dicha instancia perdieron con La Rioja, por 72 a 55, y luego con Sucre (Bolivia) por 65 a 53, quedando sin chances de luchar por el quinto lugar. Pese a la mejora, todavía falta mucho por hacer en dicha disciplina, con buenos talentos pero con carencia de roce competitivo en sus diferentes niveles.
Por el lado del ciclismo, las expectativas en Perú eran superar las dos medallas de oro conseguidas el año pasado (en la prueba de ruta 70 y 100 kilómetros) y no se pudo, más allá de que a diferencia de 2011 se logró el bronce en la contrarreloj. Hay que tener en cuenta, además, las desventajas que afrontaron los ciclistas salteños: no conocer el circuito, los ganadores de oro y plata, Tarija y Arequipa, lo conocían y lo duro que fue en la segunda jornada de competencia trepar y recorrer los 110 kilómetros con una altura cercana a los 3.000 metros sobre el nivel del mar, en la prueba de ruta. Ayer, último día, no se corrió por falta de ambulancia, seguridad y auxilio. Un papelón.
inicia sesión o regístrate.
Después de cinco días de competencia hoy se sabrá, a última hora, quién es el campeón de los Juegos Deportivos de la Juventud Trasandinas, en su XIV edición Perú 2012. Si bien el resultado deportivo final importa y mucho, hay que destacar también todo lo que gira alrededor de la competencia como la sociabilidad que se genera entre unos y otros (deportistas, dirigentes, delegados y periodistas) y la experiencia que chicos y jóvenes adquieren dentro de un universo particular y netamente deportivo.
Entre los diversos aspectos que componen una competencia de este tipo, la organización siempre está en la mira de todos. En esta edición peruana de los Judejut las opiniones no son las mejores, todo lo contrario. Demasiadas falencias de manera sistemática opacaron las expectativas previas a la competencia. En el marco de ciudades muy ricas en sus tradiciones, costumbres y culturas, con lugares que conservan la herencia colonial representadas a través de una arquitectura única, la organización deportiva debió estar a la altura y, sin embargo, trascendió más por sus fallas que por sus aciertos.
En el aspecto deportivo Salta presenta mejoras en algunas de sus disciplinas, igual situación de años anteriores en otras y también un retroceso. Vamos por partes. En la sede de Arequipa el básquet femenino superó la actuación del año pasado. Sin siquiera pasar la primera ronda en 2011, perdieron cinco de seis partidos, y este año se metieron en cuartos de final entre los ocho mejores equipos transandinos. En dicha instancia perdieron con La Rioja, por 72 a 55, y luego con Sucre (Bolivia) por 65 a 53, quedando sin chances de luchar por el quinto lugar. Pese a la mejora, todavía falta mucho por hacer en dicha disciplina, con buenos talentos pero con carencia de roce competitivo en sus diferentes niveles.
Por el lado del ciclismo, las expectativas en Perú eran superar las dos medallas de oro conseguidas el año pasado (en la prueba de ruta 70 y 100 kilómetros) y no se pudo, más allá de que a diferencia de 2011 se logró el bronce en la contrarreloj. Hay que tener en cuenta, además, las desventajas que afrontaron los ciclistas salteños: no conocer el circuito, los ganadores de oro y plata, Tarija y Arequipa, lo conocían y lo duro que fue en la segunda jornada de competencia trepar y recorrer los 110 kilómetros con una altura cercana a los 3.000 metros sobre el nivel del mar, en la prueba de ruta. Ayer, último día, no se corrió por falta de ambulancia, seguridad y auxilio. Un papelón.