“No quiero abrir juicio porque todo está bajo peritaje, y aunque me inclino por causas relacionadas con un problema eléctrico, la intencionalidad es otra hipótesis”. Con estas palabras el director del hospital Señor del Milagro, Alvaro Goyret, avaló los comentarios que circularon ayer por la mañana sobre el origen del incendio ocurrido el lunes en el establecimiento. El siniestro afectó las instalaciones del ala sur, hacia calle Leguizamón. La zona permanece vallada y custodiada por efectivos policiales y de bomberos, y hasta que no concluyan los peritajes no se permite el acceso ni siquiera a las autoridades del hospital, tareas que se llevan a cabo con total hermetismo.
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“No quiero abrir juicio porque todo está bajo peritaje, y aunque me inclino por causas relacionadas con un problema eléctrico, la intencionalidad es otra hipótesis”. Con estas palabras el director del hospital Señor del Milagro, Alvaro Goyret, avaló los comentarios que circularon ayer por la mañana sobre el origen del incendio ocurrido el lunes en el establecimiento. El siniestro afectó las instalaciones del ala sur, hacia calle Leguizamón. La zona permanece vallada y custodiada por efectivos policiales y de bomberos, y hasta que no concluyan los peritajes no se permite el acceso ni siquiera a las autoridades del hospital, tareas que se llevan a cabo con total hermetismo.
Según un relevamiento aproximado, el fuego solo produjo daños materiales. Concretamente quedaron destruidas la sala de fisioterapia y el consultorio de enfermedades de transmisión sexual (ETS) y sida.
En ese orden, el perjuicio mayor, irrecuperable, son las historias clínicas que había en el consultorio. Esto dio lugar a la hipótesis de un eventual incendio provocado, puesto que no se afectó ni un solo equipo ni máquina de fisioterapia. Aparentemente, al detectarse el inicio del fuego, el personal actuó precozmente. Por un lado avisaron al 911 mientras retiraban toda la aparatología hacia una zona segura. Por otro, se evacuó primero a los pacientes internados en Dermatología (un pabellón aledaño) y luego a aquellos en Oncología y Reumatología, ubicados a unos 50 metros. Estos últimos fueron regresados el mismo lunes, en tanto que a los de Dermatología se los redistribuyó en otros servicios.
Ayer por la mañana, salvo Fisioterapia, todas las otras áreas cerradas (incluyendo Endoscopía y El Arca) atendieron público en otros lugares.