A las pocas horas de haberse producido la muerte de Diego Federico Quiroga (32), el hombre que agonizó seis días en el hospital San Bernardo tras recibir nueve balazos, el culpable, el cabo de policía Hugo Vilte Cardozo, quedó detenido y su situación se complicó aún más. El autor del ataque, que fue aprehendido poco después de dispararle a Quiroga, en el acceso al barrio El Círculo III, fue notificado del cambio de carátula, que pasó de “tentativa de homicidio” a “homicidio calificado agravado”.
El uniformado declaró ante el juez de Instrucción Formal 6, José María Alvarado Solá, el 11 del corriente y dijo: “No sé por qué le disparé”, agregando luego otra frase confusa: “No sabía que le había disparado a él, no me acuerdo”.
Está previsto que el hombre vuelva a declarar esta semana, en compañía de un defensor oficial.
El policía (31), con una antigüedad de nueve años en la fuerza, es soltero, vive con sus padres, tiene una hoja de servicios impecable y se especula que las razones del ataque a Quiroga, están vinculadas a un arranque de celos.
La Brigada de Investigaciones está a cargo de la pesquisa y ya habrían identificado a la novia del responsable, quien sería una agente de la Policía Turística.
El pedido de la familia
Los familiares de la víctima exigieron justicia y pidieron que el magistrado llegue hasta las últimas consecuencias. “Diego no conocía al asesino y tampoco andaba en cosas raras”, desvirtuando las versiones de un drama pasional.
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A las pocas horas de haberse producido la muerte de Diego Federico Quiroga (32), el hombre que agonizó seis días en el hospital San Bernardo tras recibir nueve balazos, el culpable, el cabo de policía Hugo Vilte Cardozo, quedó detenido y su situación se complicó aún más. El autor del ataque, que fue aprehendido poco después de dispararle a Quiroga, en el acceso al barrio El Círculo III, fue notificado del cambio de carátula, que pasó de “tentativa de homicidio” a “homicidio calificado agravado”.
El uniformado declaró ante el juez de Instrucción Formal 6, José María Alvarado Solá, el 11 del corriente y dijo: “No sé por qué le disparé”, agregando luego otra frase confusa: “No sabía que le había disparado a él, no me acuerdo”.
Está previsto que el hombre vuelva a declarar esta semana, en compañía de un defensor oficial.
El policía (31), con una antigüedad de nueve años en la fuerza, es soltero, vive con sus padres, tiene una hoja de servicios impecable y se especula que las razones del ataque a Quiroga, están vinculadas a un arranque de celos.
La Brigada de Investigaciones está a cargo de la pesquisa y ya habrían identificado a la novia del responsable, quien sería una agente de la Policía Turística.
El pedido de la familia
Los familiares de la víctima exigieron justicia y pidieron que el magistrado llegue hasta las últimas consecuencias. “Diego no conocía al asesino y tampoco andaba en cosas raras”, desvirtuando las versiones de un drama pasional.