Por Fernando Stamatea
inicia sesión o regístrate.
Por Fernando Stamatea
Muchas veces no alcanzamos nuestros proyectos porque nos falta un plan para concretarlos, cada proyecto comienza con una estrategia para saber cuáles son los pasos que tenemos que ir dando.
Hoy sabemos que a los cinco meses de embarazo, el bebe puede oír, recordar y aprender. El primer violonchelista del Colón, contó que cierta vez estaban ensayando una composición musical muy difícil que los otros músicos no podían tocar, pero sin embargo a él le resultaba fácil. Cuando llegó a su casa le contó a su madre lo ocurrido, a lo que ella respondió: -“No me sorprende, ese tema musical era el que yo oía cuando estabas en la panza.”
Por ello, en primer lugar necesitarás buscar el propósito por el cual naciste para que a partir de allí pueda establecer un plan de metas para llegar a él.
Para llegar a la meta necesitamos un plan.
¿Querés gozar de una buena salud? ¿Cuál es tu plan?
¿Querés progresar económicamente? ¿Cuál es tu plan?
¿Anhelas tener paz en tu casa? ¿Cuál es tu plan?
¿Deseas tener una mejor comunicación con tus hijos? ¿Cuál es tu plan?
¿Necesitas buscar un nuevo trabajo? ¿Cuál es tu plan?
¿Estás buscando mejorar y aumentar tu red de relaciones interpersonales? ¿Cuál es tu plan?
Necesitamos conocer los pasos que transitaremos hasta llegar al objetivo. Separá tiempo y escribí la forma en que llegarás a tu sueño.
Si mi interés es escribir un best seller, antes de comenzar a escribir tendré que comenzar a pensar en un título.
Si mi interés es hacer un edificio primero tengo que averiguar cómo es el terreno que estaré comprando, si en ese espacio se permite construir o no, es decir, tenemos que tener un plan a seguir.
Separa tiempo, cada día, al levantarte, separá un tiempo para anotar tres cosas mínimas que harás para alcanzar tu sueño. Nadie podrá hacer esta tarea por vos.
Registrá todos los pasos a seguir, desde los pequeños hasta los grandes y todos los días comprometete a llevar a cabo tres pequeños pasos a cumplir.
Tener una mente abierta, cuando tengas la mente abierta podrás conectarte con cualquier persona, en cualquier circunstancia y tomar todo desafío que venga a tu mano. Y este nuevo que hayas recibido, esta flexibilidad de poder salir de lo que funciona para entrar a lo que sí funciona, activará tu compromiso con vos mismo, con tu propio plan.
Si el plan que diseñaste para llegar a la meta no funciona, sé flexible y cambialo, buscá nuevas estrategias.
No sigas haciendo esas cosas que no funcionan y esperes resultados distintos.
Aprendamos a no ilusionarnos con aquello que no produce absolutamente nada.
Hacé fácil lo difícil.