En las panaderías del conurbano bonaerense también subió el precio del kilo de pan (pasó de $16 a $26) e inmediatamente se noto una disminución del consumo del orden del 25%. Los industriales le echan la culpa al valor de la bolsa de harina que llegó a costar $380 en esa jurisdicción y hasta $420 en el interior.
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En las panaderías del conurbano bonaerense también subió el precio del kilo de pan (pasó de $16 a $26) e inmediatamente se noto una disminución del consumo del orden del 25%. Los industriales le echan la culpa al valor de la bolsa de harina que llegó a costar $380 en esa jurisdicción y hasta $420 en el interior.
El titular de la Federación Industrial Panaderil, Emilio Majori, consideró que el precio del producto debería subir hasta los $28 para poder cubrir el costo de producción. El dirigente señaló la caída de la venta en “lugares donde verdaderamente es una necesidad”, como los barrios más pobres.
Según Majori, la industria está relegando utilidades para intentar que cambie la situación de caída en las ventas, producto del repentino aumento del precio, mientras que el Gobierno asegura que el kilo del producto deber ubicarse en los $10. Insistió, por otra parte, que para la anécdota popular quedó el kilo de pan a $10 que impulsa el secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno.
El titular del Centro de Industriales Panaderos de la Ciudad de Buenos Aires, José Alvarez, no opina igual que Majori y pronosticó que el precio del pan se normalizará en los próximos días cuando descienda el costo de la harina por el ingreso de la nueva cosecha de trigo a molienda.
Otra teoría
Alvarez dijo que “no tendría que haber aumento” en el precio del pan porque ya se reflejaron importantes bajas en la harina, y aún falta que descienda más. El dirigente señaló que el precio de la bolsa de harina para la producción de pan continuará bajando, porque ya se comenzó a comercializar el trigo de la nueva cosecha, lo que subsanará la escasez que había impulsado los valores.
“Si bien la bolsa de harina y el trigo habían aumentado, se están registrando bajas muy importantes, ya que tanto la industria molinera como los vendedores de granos lo están demostrando”, consideró Alvarez.
Explicó que esa entidad que dirige, otras instituciones del sector y la Cámara Molinera mantienen reuniones diarias para seguir de cerca el comportamiento de los precios.