Cuentas claras conservan la amistad, o la enemistad. Ayer, en medio de una fuerte polémica, el Gobierno nacional salió a desmentir una intervención al diario Clarín.
Pero lo cierto es que la negativa estuvo entremezclada con la decisión del jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri, quien firmó un decreto de necesidad y urgencia sobre libertad de expresión, que crea en la Ciudad de Buenos Aires un fuero especial de protección a “periodistas y medios de comunicación”, en el que están los principales medios.
De todos modos, desde el oficialismo, el ministro del Interior y Transporte, Florencio Randazzo, salió a desmentir una posible intervención al principal diario argentino tras asegurar que los rumores que circularon durante los últimos días sobre el desembarco oficial en Clarín por parte de la Comisión Nacional de Valores “son una chantada”, mientras que el diputado ultra-K Carlos Kunkel sostuvo que “de ninguna manera” el Gobierno va a “avanzar contra la libertad de expresión”.
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Cuentas claras conservan la amistad, o la enemistad. Ayer, en medio de una fuerte polémica, el Gobierno nacional salió a desmentir una intervención al diario Clarín.
Pero lo cierto es que la negativa estuvo entremezclada con la decisión del jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri, quien firmó un decreto de necesidad y urgencia sobre libertad de expresión, que crea en la Ciudad de Buenos Aires un fuero especial de protección a “periodistas y medios de comunicación”, en el que están los principales medios.
De todos modos, desde el oficialismo, el ministro del Interior y Transporte, Florencio Randazzo, salió a desmentir una posible intervención al principal diario argentino tras asegurar que los rumores que circularon durante los últimos días sobre el desembarco oficial en Clarín por parte de la Comisión Nacional de Valores “son una chantada”, mientras que el diputado ultra-K Carlos Kunkel sostuvo que “de ninguna manera” el Gobierno va a “avanzar contra la libertad de expresión”.
No bombardeen Bs. As.
Pero en la otra vereda, las críticas al decreto de Macri no se hicieron esperar. El senador nacional Aníbal Fernández calificó el instrumento legal de “alcahueterismo clarinesco llamativo”, y confesó que “después de Cañito, Firulete y Piñón Fijo es lo más gracioso que he visto en los últimos años”.
Por su parte, el jefe de Gabinete, Juan Manuel Abal Medina, criticó el supuesto objetivo de “proteger la libertad de prensa”, y aseguró que “el decreto de Macri es una falta de respeto al orden jurídico, ya que para aplicarla habría que violar la norma nacional”.
Asimismo, otros que cuestionaron duramente al macrismo y el decreto fueron los gobernadores de Jujuy, Eduardo Fellner, de Formosa, Gildo Insfrán, y de La Rioja, Luis Beder Herrera.
Hurto calamitoso
Fiel a su discurso crítico, el senador nacional Luis Juez señaló que Macri es un “aprovechador que en forma sobreactuada defiende al Grupo Clarín”, y disparó: “Este tipo dice que quiere defender la libertad de opinión y la semana pasada los cagó a palos a los trabajadores del Borda”.
El senador del FAP enfatizó que “nunca le escuché (a Macri) una definición seria en un tema puntual, pero tiene atrás un equipo de marketing sostenido con millones de pesos que pagan los contribuyentes de la Ciudad de Buenos Aires”.
En declaraciones a Canal 26, Juez subrayó: “Lo de Macri es un claro acto de aprovechamiento que en el derecho penal se llama hurto calamitoso, que es cuando vos te aprovechás del estrago y le sacás la billetera al negro que se está retorciendo después de un choque”.
Finalmente, el coordinador de AFSCA-La Plata, Guillermo Guerín, aseguró que “con el DNU de Macri, la derecha argentina intenta un absurdo ensayo secesionista para favorecer a empresas amigas”, y que instalaría “la presencia de situaciones de gravedad institucional inéditas”.
Kunkel y el periodismo militante
El diputado “k” Carlos Kunkel salió a hablar del proyecto oficial de expropiar Papel Prensa y lanzó una frase, que puede ser un fallido o una sinceridad brutal del legislador oficialista. Kunkel habló de “periodistas nuestros” y debió aclarar después que definió como “nuestros en el sentido de que están identificados con la causa nacional y no, con un partido”.
El senador Luis Juez afirmó que “Macri es un aprovechador que defiende al Grupo Clarín”, y agregó: “Este tipo dice que quiere defender la libertad de opinión y la semana pasada los cagó a palos a los trabajadores del Borda”.
El diputado Francisco de Narváez consideró que estuvo “muy bien” el jefe de Gobierno porteño con el decreto de protección de la libertad de prensa y dijo que los legisladores bonaerenses de su partido presentarán un proyecto similar.
El jefe de Gabinete, Juan Manuel Abal Medina, dijo: “Por más que Macri solo busque beneficiar a Clarín, la ley de servicios de comunicación audiovisual está vigente pese a las trabas”.
El denarvaísta José “Pepe” Scioli consideró que “una intervención del Gobierno al Grupo Clarín sería el avance más grave realizado por el kirchnerismo sobre la libertad de expresión y el sistema democrático”.
El senador Aníbal Fernández ironizó que “el decreto de Macri, después de Cañito, Firulete y Piñón Fijo, es lo más gracioso” que ha visto en los últimos años. “Suena tan torpe y de alcahueterismo clarinesco llamativo”, dijo.