La presidenta Cristina de Kirchner puso en marcha el plan “Mirar para cuidar” para controlar los precios de unos 500 productos de la canasta básica en 50 ciudades de todo el país, que, según dijo, representan a 19 millones de personas, casi la mitad de la población argentina.
“Tenemos que ser conscientes del momento que vive el mundo, de lo que hemos logrado, tenemos que organizarnos”, afirmó durante el acto realizado en la Secretaría de Comercio Interior, en el que también instó a “cuidar las convenciones colectivas de trabajo, el salario mínimo”.
“No hay que horrorizarse porque los empresarios quieren ganar mucha plata, o que los trabajadores quieran mejores salarios, porque son los conflictos naturales de las sociedades. Si nadie quiere discutir nada es la paz de los cementerios, y eso no es saludable para nadie”, sostuvo la jefa de Estado.
Además, la mandataria pidió “desdramatizar” las pujas económicas y políticas, que “no significa tomar las cosas en serio”. “Una cosa es la seriedad y otra la dramatización para escandalizar, paralizar”, dijo.
En medio del discurso, la jefa de Estado trazó ayer una clara división entre quienes están a favor de su gestión en el gobierno nacional y quienes no y, sin identificar a sector alguno, aseguró: “Nosotros vamos por más y ellos vienen por todo”.
Cristina ensayó una suerte de diferenciación, según su opinión, de quienes aprueban su administración y los que la cuestionan.
“Se puede escuchar gente que critica a quienes se embarazan para cobrar la asignación universal por hijo o que el problema de la inflación son los salarios. ¿Por quiénes van ellos? Ellos van por todas estas conquistas sociales de todos estos años”, dijo.
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La presidenta Cristina de Kirchner puso en marcha el plan “Mirar para cuidar” para controlar los precios de unos 500 productos de la canasta básica en 50 ciudades de todo el país, que, según dijo, representan a 19 millones de personas, casi la mitad de la población argentina.
“Tenemos que ser conscientes del momento que vive el mundo, de lo que hemos logrado, tenemos que organizarnos”, afirmó durante el acto realizado en la Secretaría de Comercio Interior, en el que también instó a “cuidar las convenciones colectivas de trabajo, el salario mínimo”.
“No hay que horrorizarse porque los empresarios quieren ganar mucha plata, o que los trabajadores quieran mejores salarios, porque son los conflictos naturales de las sociedades. Si nadie quiere discutir nada es la paz de los cementerios, y eso no es saludable para nadie”, sostuvo la jefa de Estado.
Además, la mandataria pidió “desdramatizar” las pujas económicas y políticas, que “no significa tomar las cosas en serio”. “Una cosa es la seriedad y otra la dramatización para escandalizar, paralizar”, dijo.
En medio del discurso, la jefa de Estado trazó ayer una clara división entre quienes están a favor de su gestión en el gobierno nacional y quienes no y, sin identificar a sector alguno, aseguró: “Nosotros vamos por más y ellos vienen por todo”.
Cristina ensayó una suerte de diferenciación, según su opinión, de quienes aprueban su administración y los que la cuestionan.
“Se puede escuchar gente que critica a quienes se embarazan para cobrar la asignación universal por hijo o que el problema de la inflación son los salarios. ¿Por quiénes van ellos? Ellos van por todas estas conquistas sociales de todos estos años”, dijo.
Emotivo encuentro
Ayer, la Presidenta también recibió a Agustín, un niño que protagoniza un video que fue furor en las redes sociales. También lo hizo con Mara, una nieta de desaparecidos.
Ambos niños estuvieron presentes durante la videoconferencia con la ciudad de Venecia con motivo de la inauguración de la Bienal desde el museo del Bicentenario.
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