Fue un discurso que pegó de lleno en el centro del empresariado argentino. Anoche, durante el acto de celebración del Día de la Industria, en Tecnópolis, la presidenta Cristina Fernández de Kirchner aprovechó para revelar el balance positivo de la administración kirchnerista durante los últimos 10 años, al resaltar que “no les ha ido mal a los trabajadores, pero tampoco a los empresarios. El modelo de crecimiento fue exitoso”, aseguró.
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Fue un discurso que pegó de lleno en el centro del empresariado argentino. Anoche, durante el acto de celebración del Día de la Industria, en Tecnópolis, la presidenta Cristina Fernández de Kirchner aprovechó para revelar el balance positivo de la administración kirchnerista durante los últimos 10 años, al resaltar que “no les ha ido mal a los trabajadores, pero tampoco a los empresarios. El modelo de crecimiento fue exitoso”, aseguró.
Sin la presencia del titular de la UIA, Héctor Méndez, quién había dicho en una entrevista con El Tribuno que el país debería tener un ministro de Economía “con más fortaleza”, la mandataria reivindicó el crecimiento de la economía. Méndez evitó la polémica y salió del país junto a su familia. Durante esa entrevista, también advirtió que “hay muchos que no quieren enfrentarse con un disgusto de la Presidenta y entonces hay algunos ministros que no pueden enfrentar la realidad”.
Lo cierto es que Cristina, quien llegó 5 minutos antes de las 21 al predio de Villa Martelli y fue la única oradora, resaltó ante los hombres de negocios “la reindustrialización de la Argentina a partir de 2003 fue una decisión para sustituir importaciones, generar millones de puestos de trabajo, valor agregado y lograr las cosas que hemos logrado”.
En ese sentido, insistió en que aspira a que “el proceso de reindustrialización no se detenga”, y destacó como fundamental fomentar la educación, dado que “está íntimamente vinculada a la industria y a lo que aspiramos que sea, con recursos altamente capacitados”.
También resaltó el “crecimiento exponencial de la industria en esta década”, que se pudo ver en ventas récord de autos nuevos y usados.
Finalmente, la Presidenta destacó: “Todos podemos esforzarnos y tener capacidades, pero si el país no acompaña con un modelo macroeconómico, desde el sector empresario o el sector laboral, es imposible”.