La controvertida figura de Julio Humberto Grondona, por su magnitud y su perfil de liderazgo, supo recoger admiración y reconocimientos por su amplia capacidad dirigencial, que lo entronizó en la AFA por 35 años ininterrumpidos, sin oposición ni disenso alguno en la calle Viamonte. Pero también supo cultivar enemigos acérrimos y detractores a lo largo de muchos años. Y su enemigo más célebre no fue otro que el "peso pesado" mayor de la pelota, el mejor futbolista de la historia, aquel que ejerció una defensa férrea del futbolista y se sintió siempre más cómodo en la posición más encendida y radical, aquella que lo enfrentó con el poder. La relación entre Diego Armando Maradona y Grondona tuvo vaivenes, desencantos y reconciliaciones a lo largo del tiempo.
El 10 nos regaló un Mundial a los argentinos, el último retazo de gloria, allá por 1986, cuando don Julio ya era presidente de AFA.
El reconocimiento a Grondona en el mundo y sus pergaminos mucho tenían que ver con Maradona. Pero fue el mismo Grondona el que le "soltó la mano" en USA 94, cuando Diego nos dejó vacíos y sin Mundial a los argentinos.
Maradona siempre renegó del mandamás de la AFA, de sus coqueteos con la mafia de la FIFA, del oscurantismo de un proceso cuasimonárquico y del escaso reconocimiento a los campeones. Hasta que don Julio le volvió a apretar la mano, para darle el reconocimiento que Pelusa tanto reclamaba, nombrándolo DT del seleccionado. Y lo volvió a dejar en la vía, tras el rotundo 4 a 0 de Alemania en el Mundial Sudáfrica 2010.
Y uno de los puntos más álgidos de la conflictiva relación llegó casi en los últimos días de vida del capo de la AFA. Un desacertado e ingrato comentario de Grondona tras el partido de Argentina con Irán en la primera ronda de Brasil 2014, tildando al astro de "mufa", sacó a relucir los rencores y las heridas de una relación áspera, pero también marcada por contradicciones.
Ayer, tras conocerse la noticia del fallecimiento de Julio Grondona, Maradona no fue indiferente y dejó un silencioso homenaje en su página oficial de Facebook: "No voy a decir nada. Un minuto de silencio, por profundo respeto a sus nietos. Julio Grondona (1931-2014)", se limitó a expresar el 10, adjuntando una vieja foto de ambos en el Juvenil del 79.
El 10 nos regaló un Mundial a los argentinos, el último retazo de gloria, allá por 1986, cuando don Julio ya era presidente de AFA.
El reconocimiento a Grondona en el mundo y sus pergaminos mucho tenían que ver con Maradona. Pero fue el mismo Grondona el que le "soltó la mano" en USA 94, cuando Diego nos dejó vacíos y sin Mundial a los argentinos.
Maradona siempre renegó del mandamás de la AFA, de sus coqueteos con la mafia de la FIFA, del oscurantismo de un proceso cuasimonárquico y del escaso reconocimiento a los campeones. Hasta que don Julio le volvió a apretar la mano, para darle el reconocimiento que Pelusa tanto reclamaba, nombrándolo DT del seleccionado. Y lo volvió a dejar en la vía, tras el rotundo 4 a 0 de Alemania en el Mundial Sudáfrica 2010.
Y uno de los puntos más álgidos de la conflictiva relación llegó casi en los últimos días de vida del capo de la AFA. Un desacertado e ingrato comentario de Grondona tras el partido de Argentina con Irán en la primera ronda de Brasil 2014, tildando al astro de "mufa", sacó a relucir los rencores y las heridas de una relación áspera, pero también marcada por contradicciones.
Ayer, tras conocerse la noticia del fallecimiento de Julio Grondona, Maradona no fue indiferente y dejó un silencioso homenaje en su página oficial de Facebook: "No voy a decir nada. Un minuto de silencio, por profundo respeto a sus nietos. Julio Grondona (1931-2014)", se limitó a expresar el 10, adjuntando una vieja foto de ambos en el Juvenil del 79.
Las evocaciones de Menotti y Bilardo
César Luis Menotti y Carlos Salvador Bilardo no son solo los dos entrenadores que llevaron a la Selección argentina a la gloria en un Mundial (en 1978 y 1986). También fueron creadores de dos estilos y filosofías bien diferenciadas. Y pese a hallarse en las antípodas ideológicas uno de otro, si de fútbol se trata, coincidieron en los mensajes de condolencias y respetuoso reconocimiento para Julio Grondona.
El Flaco elogió las condiciones de "animal político" de Grondona. "Fue un dirigente muy hábil. No es fácil sostenerse más de treinta años como dirigente en la AFA. Con él, personalmente tuve una relación cordial y respetuosa, pese a las profundas diferencias. Grondona tenía potrero y, a su vez, tenía un gran conocimiento del fútbol argentino", expresó Menotti, para luego añadir: "Grondona sabía cómo se llamaba el equipo de Tandil, por ejemplo. Tenía una noción de que AFA manejara con un poder absoluto, en un momento difícil cuando asumió. Más que de fútbol como juego, era conocedor de fútbol como dirigente. Era un hombre de fútbol".
Por su parte, Carlos Bilardo, quien adelantó que dejará el cargo de coordinador de Selecciones, manifestó su profundo pesar. "Grondona hizo un montón de cosas por esto, dejó la vida por el fútbol. No tengo ganas de seguir. A mí me defendió cuando tenía en contra al 80 por ciento del periodismo deportivo, antes de México 86. En ese momento, el gobierno no me quería, pero él siempre me defendió", se sinceró el Narigón con mucho sentimiento.
Vila, el último de sus adversarios
El empresario televisivo y expresidente de Independiente Rivadavia de Mendoza, Daniel Vila, fue quien en su momento alzó la voz opositora más fuerte contra Julio Grondona. Y todavía hoy es recordada su elocuente "autoproclamación" como presidente y puesta en escena en las afueras de la AFA junto a un grupo de dirigentes del interior (en octubre de 2011), mientras, puertas para adentro, Don Julio ganaba, con el apoyo de la mayoría de los clubes, una nueva reelección.
No habían pasado dos horas de la muerte de Grondona cuando Vila habló de la "renovación" que este hecho debe producir en el fútbol.
"Lo que pasó es un hecho natural, más en una persona mayor. El reglamento sostiene que en caso de acefalía debe acceder el vicepresidente de la AFA, Luis Segura, y llamar a elecciones en treinta días. A partir de ahora se inaugurará un nuevo ciclo sin Grondona en el que el Gobierno nacional tendrá un rol decisivo, dado que es el principal aportante de dinero a la AFA. La política y el fútbol van de la mano", expresó.
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La controvertida figura de Julio Humberto Grondona, por su magnitud y su perfil de liderazgo, supo recoger admiración y reconocimientos por su amplia capacidad dirigencial, que lo entronizó en la AFA por 35 años ininterrumpidos, sin oposición ni disenso alguno en la calle Viamonte. Pero también supo cultivar enemigos acérrimos y detractores a lo largo de muchos años. Y su enemigo más célebre no fue otro que el "peso pesado" mayor de la pelota, el mejor futbolista de la historia, aquel que ejerció una defensa férrea del futbolista y se sintió siempre más cómodo en la posición más encendida y radical, aquella que lo enfrentó con el poder. La relación entre Diego Armando Maradona y Grondona tuvo vaivenes, desencantos y reconciliaciones a lo largo del tiempo.
El 10 nos regaló un Mundial a los argentinos, el último retazo de gloria, allá por 1986, cuando don Julio ya era presidente de AFA.
El reconocimiento a Grondona en el mundo y sus pergaminos mucho tenían que ver con Maradona. Pero fue el mismo Grondona el que le "soltó la mano" en USA 94, cuando Diego nos dejó vacíos y sin Mundial a los argentinos.
Maradona siempre renegó del mandamás de la AFA, de sus coqueteos con la mafia de la FIFA, del oscurantismo de un proceso cuasimonárquico y del escaso reconocimiento a los campeones. Hasta que don Julio le volvió a apretar la mano, para darle el reconocimiento que Pelusa tanto reclamaba, nombrándolo DT del seleccionado. Y lo volvió a dejar en la vía, tras el rotundo 4 a 0 de Alemania en el Mundial Sudáfrica 2010.
Y uno de los puntos más álgidos de la conflictiva relación llegó casi en los últimos días de vida del capo de la AFA. Un desacertado e ingrato comentario de Grondona tras el partido de Argentina con Irán en la primera ronda de Brasil 2014, tildando al astro de "mufa", sacó a relucir los rencores y las heridas de una relación áspera, pero también marcada por contradicciones.
Ayer, tras conocerse la noticia del fallecimiento de Julio Grondona, Maradona no fue indiferente y dejó un silencioso homenaje en su página oficial de Facebook: "No voy a decir nada. Un minuto de silencio, por profundo respeto a sus nietos. Julio Grondona (1931-2014)", se limitó a expresar el 10, adjuntando una vieja foto de ambos en el Juvenil del 79.
El 10 nos regaló un Mundial a los argentinos, el último retazo de gloria, allá por 1986, cuando don Julio ya era presidente de AFA.
El reconocimiento a Grondona en el mundo y sus pergaminos mucho tenían que ver con Maradona. Pero fue el mismo Grondona el que le "soltó la mano" en USA 94, cuando Diego nos dejó vacíos y sin Mundial a los argentinos.
Maradona siempre renegó del mandamás de la AFA, de sus coqueteos con la mafia de la FIFA, del oscurantismo de un proceso cuasimonárquico y del escaso reconocimiento a los campeones. Hasta que don Julio le volvió a apretar la mano, para darle el reconocimiento que Pelusa tanto reclamaba, nombrándolo DT del seleccionado. Y lo volvió a dejar en la vía, tras el rotundo 4 a 0 de Alemania en el Mundial Sudáfrica 2010.
Y uno de los puntos más álgidos de la conflictiva relación llegó casi en los últimos días de vida del capo de la AFA. Un desacertado e ingrato comentario de Grondona tras el partido de Argentina con Irán en la primera ronda de Brasil 2014, tildando al astro de "mufa", sacó a relucir los rencores y las heridas de una relación áspera, pero también marcada por contradicciones.
Ayer, tras conocerse la noticia del fallecimiento de Julio Grondona, Maradona no fue indiferente y dejó un silencioso homenaje en su página oficial de Facebook: "No voy a decir nada. Un minuto de silencio, por profundo respeto a sus nietos. Julio Grondona (1931-2014)", se limitó a expresar el 10, adjuntando una vieja foto de ambos en el Juvenil del 79.
Las evocaciones de Menotti y Bilardo
César Luis Menotti y Carlos Salvador Bilardo no son solo los dos entrenadores que llevaron a la Selección argentina a la gloria en un Mundial (en 1978 y 1986). También fueron creadores de dos estilos y filosofías bien diferenciadas. Y pese a hallarse en las antípodas ideológicas uno de otro, si de fútbol se trata, coincidieron en los mensajes de condolencias y respetuoso reconocimiento para Julio Grondona.
El Flaco elogió las condiciones de "animal político" de Grondona. "Fue un dirigente muy hábil. No es fácil sostenerse más de treinta años como dirigente en la AFA. Con él, personalmente tuve una relación cordial y respetuosa, pese a las profundas diferencias. Grondona tenía potrero y, a su vez, tenía un gran conocimiento del fútbol argentino", expresó Menotti, para luego añadir: "Grondona sabía cómo se llamaba el equipo de Tandil, por ejemplo. Tenía una noción de que AFA manejara con un poder absoluto, en un momento difícil cuando asumió. Más que de fútbol como juego, era conocedor de fútbol como dirigente. Era un hombre de fútbol".
Por su parte, Carlos Bilardo, quien adelantó que dejará el cargo de coordinador de Selecciones, manifestó su profundo pesar. "Grondona hizo un montón de cosas por esto, dejó la vida por el fútbol. No tengo ganas de seguir. A mí me defendió cuando tenía en contra al 80 por ciento del periodismo deportivo, antes de México 86. En ese momento, el gobierno no me quería, pero él siempre me defendió", se sinceró el Narigón con mucho sentimiento.
Vila, el último de sus adversarios
El empresario televisivo y expresidente de Independiente Rivadavia de Mendoza, Daniel Vila, fue quien en su momento alzó la voz opositora más fuerte contra Julio Grondona. Y todavía hoy es recordada su elocuente "autoproclamación" como presidente y puesta en escena en las afueras de la AFA junto a un grupo de dirigentes del interior (en octubre de 2011), mientras, puertas para adentro, Don Julio ganaba, con el apoyo de la mayoría de los clubes, una nueva reelección.
No habían pasado dos horas de la muerte de Grondona cuando Vila habló de la "renovación" que este hecho debe producir en el fútbol.
"Lo que pasó es un hecho natural, más en una persona mayor. El reglamento sostiene que en caso de acefalía debe acceder el vicepresidente de la AFA, Luis Segura, y llamar a elecciones en treinta días. A partir de ahora se inaugurará un nuevo ciclo sin Grondona en el que el Gobierno nacional tendrá un rol decisivo, dado que es el principal aportante de dinero a la AFA. La política y el fútbol van de la mano", expresó.