Los Tekis prometen calorcito de carnaval en pleno agosto

Como en Tilcara en verano, pero en Salta y en invierno. Música que invita al saltito apretadito, al brindis y a la risa incontenible: ingredientes infaltables del carnaval. Es lo que prometen Los Tekis para esta noche, a partir de las 21.30, cuando conviertan al Estadio Delmi en una sucursal de su tradicional peña tilcareña. Una vez más, los jujeños eligieron nuestra provincia para comenzar esta gira que continuará en Córdoba, el 23 de agosto. ¿La razón? "Es que en Salta es donde más cariño nos dan", argumenta Juanjo Pestoni, integrante de Los Tekis.
"La idea de trasladar la peña surgió a raíz de que hay mucha gente del norte (salteños, tucumanos, riojanos, catamarqueños) que por alguna razón se perdieron el carnaval en Tilcara y entonces quisimos repetir el formato de la peña en otros puntos del país", explicó el músico.
"A diferencia de los shows que armamos para teatros, en la peña del Delmi habrá oportunidad de vivir un verdadero carnaval de invierno. Se podrá bailar y no faltarán el talco, la espuma y el papel picado. También habrá una barra de bebidas y comidas. Por otro lado, la puesta será a full, tanto en sonido como en luces y efectos", anticipó.
La cartelera, como corresponde a una peña tradicional, contará con varios músicos invitados, "todos con onda carnavalera": Coroico, Canto 4, Diableros Jujeños, Tupac 7 y César y su Grupo Felicidad. El show central, entrada la madrugada, le corresponderá, claro, a Los Tekis.
Juanjo Pestoni es el baterista del grupo jujeño. En la rutina de la banda suele ser el estratega, pero en el escenario es un músico absolutamente apasionado, poseído. A los 10 años le regalaron su primer bombo. Pronto el cuero le quedó chico y le fue adosando el sonido de los bongós, el rototom, el octapad, las paletas y los platillos.
Con Sebastián López (primera voz, quena y charango), Mauro Coletti (vientos, coros), Pipo Valdez (vientos, guitarra), Walter Sáder (guitarra y segunda voz) y Pucho Ponce (bajo), Juanjo comparte un proyecto musical que creció a pasos agigantados desde los 90. Pero la trama que sostiene a Los Tekis es mucho más sustanciosa y compleja que la mera propuesta musical. "Queremos que la Pachamama esté presente en este mes tan especial. Agosto marca el principio del ciclo agrícola que termina en carnaval, con la cosecha. Nuestro mensaje es el respeto y la veneración de la Madre Tierra, desde la celebración del primero de agosto hasta el estallido alegre del carnaval en febrero", resumió Juanjo.
En la coherencia del mensaje no puede faltar la puntualidad del ritual. Cada agosto, durante 15 años, Los Tekis honraron a la Pachamama en un mojón en Sapagua, cerca de Humahuaca. Desde hace tres años mudaron la ceremonia a Maimará, para estar más cerca de Lozano, donde organizan cada primero de agosto un festival en honor a la Pacha (este año hubo 20 mil personas).
El momento de las ofrendas es íntimo y sublime, cuenta Juanjo. Arrodillados junto al pozo "que es chiquito pero representa la grandeza del universo", Los Tekis van convidando a la tierra -que ha sido siempre generosa- bocados de maíz, un sorbito de cada uno de los tragos fuertes que les mojan la alegría, la coca (bendito oro verde), la fe...
"Lo que queremos es mostrar nuestras costumbres, muchas de las cuales son compartidas con los salteños. Deseamos que la gente que viene de otros lugares se lleve el mensaje de respeto a la Madre Tierra y lo practique en su lugar de origen. Transmitir ese mensaje para nosotros es un deber. Guardarse el papelito en el bolsillo en vez de tirarlo al pso ya es un granito de arena. En ese sentido, la música es también un compromiso", sostiene Juanjo.
Aparte de esa profunda certeza de que la tierra no nos pertenece, sino que nosotros le pertenecemos a ella porque somos sus hijos, a Los Tekis los mueve el ejemplo de los grandes que los antecedieron: "En 1992 mirábamos el festival de Cosquín por la tele y nos maravillábamos con Los Tucu Tucu, Los Chalchaleros, Mercedes Sosa... Y soñábamos con hacer lo que ellos hacían. Después los conocimos a todos. A Los Tucu Tucu en una guitarreada. A Mercedes en su propia casa, un día que nos invitó. Y nos hicimos muy amigos de Polo Román y compartimos inolvidables asados. Tener a todos estos grandes de nuestra música sentados al frente, dándote consejos, es algo que te marca para siempre".
De ellos también aprendieron a no olvidar dónde está el eje cuando la popularidad voracea: "Las guitarreadas con amigos son nuestro cable a tierra -asegura Juanjo- . Nos divertimos y disfrutamos mucho de esas rondas. A veces tocamos con chicos que nos tienen como sus ídolos, pero en el ritual de la guitarreada somos todos iguales. Y la pasamos genial. Es la magia de la música".

Como en Tilcara en verano, pero en Salta y en invierno. Música que invita al saltito apretadito, al brindis y a la risa incontenible: ingredientes infaltables del carnaval. Es lo que prometen Los Tekis para esta noche, a partir de las 21.30, cuando conviertan al Estadio Delmi en una sucursal de su tradicional peña tilcareña. Una vez más, los jujeños eligieron nuestra provincia para comenzar esta gira que continuará en Córdoba, el 23 de agosto. ¿La razón? "Es que en Salta es donde más cariño nos dan", argumenta Juanjo Pestoni, integrante de Los Tekis.
"La idea de trasladar la peña surgió a raíz de que hay mucha gente del norte (salteños, tucumanos, riojanos, catamarqueños) que por alguna razón se perdieron el carnaval en Tilcara y entonces quisimos repetir el formato de la peña en otros puntos del país", explicó el músico.
"A diferencia de los shows que armamos para teatros, en la peña del Delmi habrá oportunidad de vivir un verdadero carnaval de invierno. Se podrá bailar y no faltarán el talco, la espuma y el papel picado. También habrá una barra de bebidas y comidas. Por otro lado, la puesta será a full, tanto en sonido como en luces y efectos", anticipó.
La cartelera, como corresponde a una peña tradicional, contará con varios músicos invitados, "todos con onda carnavalera": Coroico, Canto 4, Diableros Jujeños, Tupac 7 y César y su Grupo Felicidad. El show central, entrada la madrugada, le corresponderá, claro, a Los Tekis.
Juanjo Pestoni es el baterista del grupo jujeño. En la rutina de la banda suele ser el estratega, pero en el escenario es un músico absolutamente apasionado, poseído. A los 10 años le regalaron su primer bombo. Pronto el cuero le quedó chico y le fue adosando el sonido de los bongós, el rototom, el octapad, las paletas y los platillos.
Con Sebastián López (primera voz, quena y charango), Mauro Coletti (vientos, coros), Pipo Valdez (vientos, guitarra), Walter Sáder (guitarra y segunda voz) y Pucho Ponce (bajo), Juanjo comparte un proyecto musical que creció a pasos agigantados desde los 90. Pero la trama que sostiene a Los Tekis es mucho más sustanciosa y compleja que la mera propuesta musical. "Queremos que la Pachamama esté presente en este mes tan especial. Agosto marca el principio del ciclo agrícola que termina en carnaval, con la cosecha. Nuestro mensaje es el respeto y la veneración de la Madre Tierra, desde la celebración del primero de agosto hasta el estallido alegre del carnaval en febrero", resumió Juanjo.
En la coherencia del mensaje no puede faltar la puntualidad del ritual. Cada agosto, durante 15 años, Los Tekis honraron a la Pachamama en un mojón en Sapagua, cerca de Humahuaca. Desde hace tres años mudaron la ceremonia a Maimará, para estar más cerca de Lozano, donde organizan cada primero de agosto un festival en honor a la Pacha (este año hubo 20 mil personas).
El momento de las ofrendas es íntimo y sublime, cuenta Juanjo. Arrodillados junto al pozo "que es chiquito pero representa la grandeza del universo", Los Tekis van convidando a la tierra -que ha sido siempre generosa- bocados de maíz, un sorbito de cada uno de los tragos fuertes que les mojan la alegría, la coca (bendito oro verde), la fe...
"Lo que queremos es mostrar nuestras costumbres, muchas de las cuales son compartidas con los salteños. Deseamos que la gente que viene de otros lugares se lleve el mensaje de respeto a la Madre Tierra y lo practique en su lugar de origen. Transmitir ese mensaje para nosotros es un deber. Guardarse el papelito en el bolsillo en vez de tirarlo al pso ya es un granito de arena. En ese sentido, la música es también un compromiso", sostiene Juanjo.
Aparte de esa profunda certeza de que la tierra no nos pertenece, sino que nosotros le pertenecemos a ella porque somos sus hijos, a Los Tekis los mueve el ejemplo de los grandes que los antecedieron: "En 1992 mirábamos el festival de Cosquín por la tele y nos maravillábamos con Los Tucu Tucu, Los Chalchaleros, Mercedes Sosa... Y soñábamos con hacer lo que ellos hacían. Después los conocimos a todos. A Los Tucu Tucu en una guitarreada. A Mercedes en su propia casa, un día que nos invitó. Y nos hicimos muy amigos de Polo Román y compartimos inolvidables asados. Tener a todos estos grandes de nuestra música sentados al frente, dándote consejos, es algo que te marca para siempre".
De ellos también aprendieron a no olvidar dónde está el eje cuando la popularidad voracea: "Las guitarreadas con amigos son nuestro cable a tierra -asegura Juanjo- . Nos divertimos y disfrutamos mucho de esas rondas. A veces tocamos con chicos que nos tienen como sus ídolos, pero en el ritual de la guitarreada somos todos iguales. Y la pasamos genial. Es la magia de la música".