Colabora también en la revinculación de estas personas en el medio social y su inclusión laboral. Y esa mejora se traduce también en una mejora emocional y relacional para las familias de personas con necesidades especiales.
"Las actividades terapéuticas que llevamos adelante en el seno de la institución ayudan a los niños y adultos a desarrollarse en el mundo cotidiano". Claudia López, secretaria de Casa Sol Día
Asimismo, establece un vínculo de confianza y afecto con los chicos, sus familias y los voluntarios de la Casa, que participan activamente de todas las actividades que se diagraman en función de las necesidades de los jóvenes y adultos que allí concurren de manera diaria.
Loable labor desde 2014
La institución se creó en 2004, funciona sobre la calle Avellaneda 282 y atiende de lunes a viernes en el horario de 16 a 19.
Desde entonces realiza un trabajo loable con los jóvenes y adultos. Todos los que concurren a la institución tienen algún tipo de retardo mental, lo que técnicamente se conoce como discapacidad cognitiva.
La fundación les brinda contención de una manera única. Los profesionales y voluntarios que allí trabajan emplean un método especial para apoyar y aprovechar los talentos y habilidades de los chicos y de los adultos.
En esa línea, agregó que al involucrar personas en los juegos, los niños y adultos con discapacidades aprenden cómo interactuar correctamente con otras personas.
Capacitación
La fundación cuenta con una matrícula de 20 alumnos de entre 17 y 55 años. Allí se les enseña oficios tales como panadería y carpintería y se brindan talleres de cotillón, bijouterie, teatro, actividades prácticas, plástica, educación física y folclore.
"Es a través de la educación que los jóvenes de la fundación adquieren su desarrollo personal y social posibilitando su participación como miembro activo de la sociedad", manifestó la secretaria de la institución, Claudia López.
Acompañan a Graciela en la comisión directiva, Lidia Pizarro como vicepresidenta, María Ester Daldos como tesorera, Blanca Ávila de Barragán como protesorera y Claudia López como secretaria.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), más de mil millones de personas en todo el mundo padecen de alguna forma de discapacidad.
De este total, casi 200 millones experimentan dificultades considerables en su funcionamiento.
La OMS estima que en los años siguientes la discapacidad será un motivo de preocupación aún mayor, pues su prevalencia está aumentando.
Esta tendencia se debe principalmente al envejecimiento de la población, con el riesgo de discapacidad que ello conlleva, y al aumento mundial de enfermedades crónicas, tales como la diabetes, las enfermedades cardiovasculares, el cáncer y los trastornos de salud mental.
Desde el organismo señalan que las personas con discapacidad tienen peores resultados sanitarios, académicos, una menor participación económica y unas tasas de pobreza más altas que las personas sin discapacidad.
En parte, ello es consecuencia de los obstáculos que entorpecen el acceso de las personas con discapacidad a servicios de salud, educación, empleo y transporte.
Esas dificultades se exacerban en las comunidades menos favorecidas y especialmente en las zonas rurales.
Es por ello que la Organización Mundial de la Salud elabora informes sobre la discapacidad para reunir la mejor información disponible sobre la discapacidad, con el objetivo de mejorar la vida de las personas con necesidades especiales.
Se ofrece a los gobiernos y a la sociedad civil un análisis exhaustivo de la importancia de la discapacidad y de las respuestas proporcionadas, basado en las mejores pruebas disponibles, y recomendar la adopción de medidas de alcance nacional e internacional.
inicia sesión o regístrate.
Colabora también en la revinculación de estas personas en el medio social y su inclusión laboral. Y esa mejora se traduce también en una mejora emocional y relacional para las familias de personas con necesidades especiales.
"Las actividades terapéuticas que llevamos adelante en el seno de la institución ayudan a los niños y adultos a desarrollarse en el mundo cotidiano". Claudia López, secretaria de Casa Sol Día
Asimismo, establece un vínculo de confianza y afecto con los chicos, sus familias y los voluntarios de la Casa, que participan activamente de todas las actividades que se diagraman en función de las necesidades de los jóvenes y adultos que allí concurren de manera diaria.
Loable labor desde 2014
La institución se creó en 2004, funciona sobre la calle Avellaneda 282 y atiende de lunes a viernes en el horario de 16 a 19.
Desde entonces realiza un trabajo loable con los jóvenes y adultos. Todos los que concurren a la institución tienen algún tipo de retardo mental, lo que técnicamente se conoce como discapacidad cognitiva.
La fundación les brinda contención de una manera única. Los profesionales y voluntarios que allí trabajan emplean un método especial para apoyar y aprovechar los talentos y habilidades de los chicos y de los adultos.
En esa línea, agregó que al involucrar personas en los juegos, los niños y adultos con discapacidades aprenden cómo interactuar correctamente con otras personas.
Capacitación
La fundación cuenta con una matrícula de 20 alumnos de entre 17 y 55 años. Allí se les enseña oficios tales como panadería y carpintería y se brindan talleres de cotillón, bijouterie, teatro, actividades prácticas, plástica, educación física y folclore.
"Es a través de la educación que los jóvenes de la fundación adquieren su desarrollo personal y social posibilitando su participación como miembro activo de la sociedad", manifestó la secretaria de la institución, Claudia López.
Acompañan a Graciela en la comisión directiva, Lidia Pizarro como vicepresidenta, María Ester Daldos como tesorera, Blanca Ávila de Barragán como protesorera y Claudia López como secretaria.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), más de mil millones de personas en todo el mundo padecen de alguna forma de discapacidad.
De este total, casi 200 millones experimentan dificultades considerables en su funcionamiento.
La OMS estima que en los años siguientes la discapacidad será un motivo de preocupación aún mayor, pues su prevalencia está aumentando.
Esta tendencia se debe principalmente al envejecimiento de la población, con el riesgo de discapacidad que ello conlleva, y al aumento mundial de enfermedades crónicas, tales como la diabetes, las enfermedades cardiovasculares, el cáncer y los trastornos de salud mental.
Desde el organismo señalan que las personas con discapacidad tienen peores resultados sanitarios, académicos, una menor participación económica y unas tasas de pobreza más altas que las personas sin discapacidad.
En parte, ello es consecuencia de los obstáculos que entorpecen el acceso de las personas con discapacidad a servicios de salud, educación, empleo y transporte.
Esas dificultades se exacerban en las comunidades menos favorecidas y especialmente en las zonas rurales.
Es por ello que la Organización Mundial de la Salud elabora informes sobre la discapacidad para reunir la mejor información disponible sobre la discapacidad, con el objetivo de mejorar la vida de las personas con necesidades especiales.
Se ofrece a los gobiernos y a la sociedad civil un análisis exhaustivo de la importancia de la discapacidad y de las respuestas proporcionadas, basado en las mejores pruebas disponibles, y recomendar la adopción de medidas de alcance nacional e internacional.