¿Quieres recibir notificaciones de alertas?

15°
26 de Abril,  Salta, Centro, Argentina
PUBLICIDAD

Un vivac cómodo y fiel al espíritu dakariano

El campamento salteño renovó las energías para la segunda parte de la prueba. 
Lunes, 15 de enero de 2018 23:50
Foto: Pablo Yapura.

El Dakar vive contrastes a medida que va mutando la geografía. La competencia pasó de la arena de Perú, al barro de Bolivia y llegó al verde de Salta. Ya lo dijo el chaqueño Carlos Verza en dialogo con El Tribuno: “Aquí tenemos árboles para poder acampar o un suelo que nos permite trabajar con comodidad”. Un árbol pasó a ser un objeto de mayor importancia para el mundo dakariano y en su totalidad el Centro de Convenciones de Limache se pareció más a un lujoso hotel en comparación con los vivacs que le precedieron. 
Pero el Dakar no sería lo mismo sin esas arenas ni ese barro, o sin los árboles. El campamento es circunstancial pero el espíritu de la competencia no, hay que trabajar cualquiera sean las condiciones. 
Cerca de tres mil personas se mueven diariamente en los campamentos, entre pilotos, asistencia, organización, funcionarios, prensa, sponsors, entre otros. El movimiento es incesante, como el ruido de las herramientas, las charlas, más teniendo en cuenta que se está más cerca de la meta. 
Salta ofreció otra vez comodidad a los participantes. Quienes arribaron el domingo por la noche tuvieron más tiempo para trabajar y también para descansar. Quien recorra el vivac se podrá encontrar con gente trabajando y otra descansando al aire libre. 
Los grandes equipos, como el Team Peugeot Total, el Monster Energy Honda o el Red Bull KTM Factory ofrecen a sus pilotos sesiones de masajes apenas arriban. Los que no cuentan con tanto renombre también se la rebuscan como pueden para revitalizarse, siempre pensando en la etapa del día siguiente, como la que afrontará hoy entre nuestra ciudad y Belén. 
La mayoría de los pilotos llegó con tiempo para evaluar cada tuerca de su unidad, otros llegaron bastante retrasados, como la debutante peruana Fernanda Kanno, que ayer en horas de la mañana llegó a Tupiza y cerca de las 23 cruzó el ingreso del Centro de Convenciones de Limache. Para ella la puesta a punto será rápida y poco el descanso. 
 

Alcanzaste el límite de notas gratuitas
inicia sesión o regístrate.
Alcanzaste el límite de notas gratuitas
Nota exclusiva debe suscribirse para poder verla

El Dakar vive contrastes a medida que va mutando la geografía. La competencia pasó de la arena de Perú, al barro de Bolivia y llegó al verde de Salta. Ya lo dijo el chaqueño Carlos Verza en dialogo con El Tribuno: “Aquí tenemos árboles para poder acampar o un suelo que nos permite trabajar con comodidad”. Un árbol pasó a ser un objeto de mayor importancia para el mundo dakariano y en su totalidad el Centro de Convenciones de Limache se pareció más a un lujoso hotel en comparación con los vivacs que le precedieron. 
Pero el Dakar no sería lo mismo sin esas arenas ni ese barro, o sin los árboles. El campamento es circunstancial pero el espíritu de la competencia no, hay que trabajar cualquiera sean las condiciones. 
Cerca de tres mil personas se mueven diariamente en los campamentos, entre pilotos, asistencia, organización, funcionarios, prensa, sponsors, entre otros. El movimiento es incesante, como el ruido de las herramientas, las charlas, más teniendo en cuenta que se está más cerca de la meta. 
Salta ofreció otra vez comodidad a los participantes. Quienes arribaron el domingo por la noche tuvieron más tiempo para trabajar y también para descansar. Quien recorra el vivac se podrá encontrar con gente trabajando y otra descansando al aire libre. 
Los grandes equipos, como el Team Peugeot Total, el Monster Energy Honda o el Red Bull KTM Factory ofrecen a sus pilotos sesiones de masajes apenas arriban. Los que no cuentan con tanto renombre también se la rebuscan como pueden para revitalizarse, siempre pensando en la etapa del día siguiente, como la que afrontará hoy entre nuestra ciudad y Belén. 
La mayoría de los pilotos llegó con tiempo para evaluar cada tuerca de su unidad, otros llegaron bastante retrasados, como la debutante peruana Fernanda Kanno, que ayer en horas de la mañana llegó a Tupiza y cerca de las 23 cruzó el ingreso del Centro de Convenciones de Limache. Para ella la puesta a punto será rápida y poco el descanso. 
 

Temas de la nota

PUBLICIDAD