La necesidad impera en Santa Victoria Este luego de las inundaciones que afectaron a varios parajes de la zona, pero a pesar de que se enviaron elementos para paliar la situación a los habitantes, la ayuda no llega como tendría que llegar. O al menos así lo aseguran las mismas familias que se apostaron en la ruta provincial 54, cortando el paso en reclamo de una mejor distribución de las donaciones.
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La necesidad impera en Santa Victoria Este luego de las inundaciones que afectaron a varios parajes de la zona, pero a pesar de que se enviaron elementos para paliar la situación a los habitantes, la ayuda no llega como tendría que llegar. O al menos así lo aseguran las mismas familias que se apostaron en la ruta provincial 54, cortando el paso en reclamo de una mejor distribución de las donaciones.
Ya pasaron varios días desde que el agua hizo estragos en el norte provincial, pero los colchones, alimentos y demás elementos no llegan a los que más los necesitan y esto enfureció a los pobladores que optaron por esta medida de reclamo.
Hasta esta tarde había dos cortes, uno a la altura de Santa María y el principal en el acceso a Santa Victoria Este donde detuvieron a un camión con donaciones.
Las familias de distintas comunidades originarias soportaron el sol y la alta temperatura, esperando una respuesta del intendente Moisés Balderrama. Pero durante toda la tarde nadie habló con ellos.
Solamente Lucio Rojas hijo se hizo presente en el lugar, donde trató de calmar las aguas y brindó ayuda.
Fotos Brian Salazar