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La continuidad de una ONG peligra por falta de presupuesto

La fundación Cedrus trabaja problemáticas ambientales en Misión San Francisco.Busca alcanzar el desarrollo sustentable, pero su futuro es incierto ya que no tiene recursos.
Miércoles, 28 de febrero de 2018 00:00

Martín Gil es un joven próximo a recibirse en ingeniero en Recursos Naturales y Medio Ambiente, y trabaja hace algunos años en la fundación Cedrus (Centro de Desarrollo Rural y Urbano Sustentable).

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Martín Gil es un joven próximo a recibirse en ingeniero en Recursos Naturales y Medio Ambiente, y trabaja hace algunos años en la fundación Cedrus (Centro de Desarrollo Rural y Urbano Sustentable).

En 2014 presentaron programas, más tarde se formularon proyectos, se aprobaron pero recién pudieron ser ejecutados en mayo de 2017 con una duración de dos años, y con financiamiento de Nación. A pocos meses, sin aviso previo, un recorte presupuestario los dejó paralizados.

Este proyecto financiado por el Gobierno nacional tiene como objetivo el desarrollo integral del hábitat, en varios lugares de la provincia, con alto índices de vulnerabilidad socioambiental, por eso se eligió trabajar en la Misión San Francisco (Pichanal), en la comunidad ava guaraní donde junto a un equipo interdisciplinario de técnicos voluntario en la mejora y cuidado del medioambiente, violencia de género, educación integral, entre otros. Martín cuenta que su equipo trabajó en los últimos cinco meses en la mejora del arbolado, tipo de reforestación urbana, en el límite de la misión con el Frigorífico Bermejo, y erradicaron un microbasural de 200 metros de largo. Teniendo en cuenta que las estadísticas indican que las personas generan un kilo de residuos por día y la misión tiene un poco más de diez mil habitantes, este microbasural tenía un volumen impensado.

Allí plantaron más de 200 árboles, con los vecinos que son responsable del cuidado de ese espacio, cultivaron moringa, especies nativas o medicinales respetando el uso que la comunidad le da a la flora. El objetivo es el trabajo con las comunidades y distintas instituciones del medio, para lograr alternativas y recursos que permitan solucionar las problemáticas ambienta les del lugar. A partir de eso se hicieron huertas orgánicas, con la realización y cuidados de las propios espacios. Y también se trabajó en gestión de residuos: una problemática a la que no escapa a ninguna ciudad, buscan fomentar la separación (orgánico y no orgánico), recuperación de residuos desde el lugar donde se genera que es la casa de cada uno. Trabajaron con las escuelas, hogares particulares, la gente aprendió a separar y a re utilizarlos.

"Luego comenzamos a hacer una recolección diferenciada, actualmente solo recuperamos cartones, los llevamos a un centro de acopio en el cruce de Villa Ralle, donde con unas maquinas logran reducir el volumen de los residuos, y pueden ser reinsertado al mercado a empresas que trasforman en producto nuevo", dijo Gil.

Para la comunidad esto tiene una importancia que va más allá de lo ambiental, ya que ven los residuos como recursos que pueden generar mano de obra, aparte de mejorar el medioambiente fraccionando cartones, plásticos y preparando compost. "A los cartones lo transformamos en briqueta que reemplaza la leña, en una localidad donde no hay gas natural, la gente debe comprar leña, ahora con material recuperado generan su propio combustible", contó.

En la Misión aprendieron también a hacer abono a partir de residuos orgánicos. Un grupo de 8 mujeres separan estos residuos y lo transforman en compost. Visitan casa por casa recuperando residuos. No quieren perder esta oportunidad de mejorar la calidad de vida de la comunidad.

“Una posibilidad de trabajo”

"Estamos muy lejos de los centros de reciclados por eso sería importante la presencia del Estado porque la gestión de residuos es obligación de los municipios, pero faltan políticas de Estado”, dijo Martín Gil. No está asegurada la continuidad de la ONG. “Pero en ‘el mientras’ seguimos trabajando, con nuestros propios recursos, por la gente que se sumó a los proyectos, porque ve una oportunidad de generación de trabajo”, aseguró. “El objetivo a largo plazo de Cedrus es mejorar la calidad del ambiente y ayudar a generar un cambio de hábito, de la percepción del ambiente, y entender que un ambiente más sano se traduce en más salud para todos”. 
 

 

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