¿Quieres recibir notificaciones de alertas?

17°
27 de Abril,  Salta, Centro, Argentina
PUBLICIDAD

Una empresa boliviana invertirá para vender energía en el país

El interconectado tendrá una línea de 110 kilómetros con un costo de unos US$60 millones.Se unirán las estaciones de Yaguacua (Bolivia) y Tartagal para abastecer el norte provincial.
Lunes, 25 de junio de 2018 00:00

Bolivia está dispuesta a aprovechar el déficit energético que tiene la Argentina. La Nación vecina se consolidó como el gran proveedor de estas tierras en materia de gas y planea hacerlo en materia de energía eléctrica también. El país de Evo Morales busca convertirse en el centro energético de sudamérica y exportar a países como Argentina, Brasil, Perú y Paraguay.

Alcanzaste el límite de notas gratuitas
inicia sesión o regístrate.
Alcanzaste el límite de notas gratuitas
Nota exclusiva debe suscribirse para poder verla

Bolivia está dispuesta a aprovechar el déficit energético que tiene la Argentina. La Nación vecina se consolidó como el gran proveedor de estas tierras en materia de gas y planea hacerlo en materia de energía eléctrica también. El país de Evo Morales busca convertirse en el centro energético de sudamérica y exportar a países como Argentina, Brasil, Perú y Paraguay.

Según publican medios bolivianos, la Empresa Nacional de Electricidad (ENDE) ya inició la construcción de la primera línea de interconexión eléctrica que unirá a los dos países. El ministro de Energía boliviano, Rafael Alarcón, informó que el proyecto demandará un desembolso de US$60 millones y abastecerá al mercado del norte de Salta y Jujuy.

La planta termoeléctrica del sur de Bolivia tendrá capacidad para distribuir 500 megavatios en 2019, pero en una primera fase se exportarán entre 100 y 200 megavatios.

La obra de vinculación eléctrica internacional consiste en la construcción de un electroducto 2x132 Kv entre el Nodo Frontera (Bolivia - Argentina). El proyecto línea de transmisión Juana Azurduy de Padilla comprende la construcción de dos subestaciones, una en la localidad de Yaguacua (Bolivia) y otra en Tartagal. Según la página oficial del ENDE, para la unión de estas dos subestaciones se prevé la construcción de una línea de transmisión con una longitud aproximada de 116 km (46 km en territorio boliviano y 70 km en territorio argentino).

Según contó a El Tribuno Hugo González, gerente de Relaciones Institucionales de Edesa, el tramo de la obra en suelo boliviano ya estaría finalizada y se espera que en los próximos meses comience el tendido de cables en suelo salteño. "Estuvimos discutiendo en Buenos Aires hace un mes atrás sobre los trabajos que había que hacer. Se llegó a un acuerdo con Transnoa para hacer la ampliación con un crédito que iban a dar ellos (ENDE). Se discutía también quien iba a hacer la operación y mantenimiento de esa línea que la va a hacer Transnoa. Ellos ya tienen el proyecto terminado, por lo menos del lado boliviano donde iniciaron la construcción de la línea", expresó el directivo de Edesa.

El gerente explicó que la financiación del proyecto corre por parte de ENDE porque será esa empresa la que invertirá en Argentina. "Esto es un negocio boliviano. ENDE va a entrar al país como si fuese un generador. Le van a vender energía al sistema argentino por lo tanto la línea la tiene que hacer Ende", afirmó.

González adelantó que el 12 de julio se realizará una audiencia pública en Tartagal para la aprobación de todo lo relacionado a la obra en el lado argentino. Recién a partir de puede empezar la construcción. Durante esa jornada se presentará el proyecto y las partes interesadas podrán opinar. "Seguro estarán Transnoa, Edesa, la Municipalidad de Tartagal, la Provincia, el Ente Regulador, la Secretaría de Energía y los generadores locales", indicó.

Agregó que presentarán el informe de impacto ambiental y si no hay una posición manifiesta a la construcción a la línea se podrá empezar a construir. "Si se encara, no nos olvidemos que en el norte no es fácil construir por los inconvenientes, por los piquetes. Es una obra que se puede hacer en 12 o 18 meses", destacó.

Abastecimiento

La empresa boliviana tiene capacidad para entregar 250 megawatts en este momento. Para tener una idea, graficó que 150 megas son más o menos el doble de lo que consumen Orán y Tartagal juntos. De ese modo, esa zona quedaría muy bien servida porque se tendría 150 megas del lado boliviano, más la generación de Caimancito que es de 90 megas y 40 de del Tabacal.

"Quedaría una zona muy segura porque eso le da una tercera alimentación al norte", expresó González.

El gerente de Edesa explicó que en Tartagal si se llega a interrumpir el servicio eléctrico por algún motivo que sale de San Juancito (Jujuy) para el norte tendrán una alternativa de alimentación que es tan fuerte que le dará estabilidad al sistema.

"La línea que viene de Bolivia se inyecta a la red de Transnoa, luego la transmite al resto de red que haya. Está pensado para que principalmente abastecer el norte de Salta y a Jujuy. Van a despachar de acuerdo a las necesidades que tenga Cammesa y al precio que tengan. Es decir si ellos fijan un precio más alto que lo que fija Caimancito van a despachar primero Caimancito y después ellos. Va a depender del precio de cada momento, excepto que haya una necesidad o para el sistema o para el norte en general", finalizó.

 

Temas de la nota

PUBLICIDAD