Los núcleos educativos que agrupan a los niveles iniciales de todo el departamento General Güemes cumplieron con el desarrollo de una feria de ciencia sobre robótica denominada “Expo Robótica de los Jardines”, donde los niños que aprendieron y trabajaron con sus maestras, expusieron el pasado viernes 25 todos los trabajos elaborados en las aulas.
En ellos pudieron aplicar todo el material enviado desde el Ministerio de Educación.
En este marco, una estudiante del Profesorado de Nivel Inicial en el Instituto Martín Miguel de Güemes presentó un proyecto al cual denominó Waly. Este proyecto tiene por objetivo generar la inclusión de niños con necesidades educativas especiales en el ámbito de la educación formal, y está dirigido a la construcción de una nueva cultura que incluya a todas las personas.
Sobre este juego, su creadora, Florencia Díaz Romano, de 24 años, expresó: “Inventé un juego didáctico tomando como base las observaciones realizadas en mi formación docente, sobre la forma de trabajo con los niños con discapacidad. Estas observaciones me permitieron darme cuenta que los niños especiales carecen de elementos de juego inclusivos”.
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Los núcleos educativos que agrupan a los niveles iniciales de todo el departamento General Güemes cumplieron con el desarrollo de una feria de ciencia sobre robótica denominada “Expo Robótica de los Jardines”, donde los niños que aprendieron y trabajaron con sus maestras, expusieron el pasado viernes 25 todos los trabajos elaborados en las aulas.
En ellos pudieron aplicar todo el material enviado desde el Ministerio de Educación.
En este marco, una estudiante del Profesorado de Nivel Inicial en el Instituto Martín Miguel de Güemes presentó un proyecto al cual denominó Waly. Este proyecto tiene por objetivo generar la inclusión de niños con necesidades educativas especiales en el ámbito de la educación formal, y está dirigido a la construcción de una nueva cultura que incluya a todas las personas.
Sobre este juego, su creadora, Florencia Díaz Romano, de 24 años, expresó: “Inventé un juego didáctico tomando como base las observaciones realizadas en mi formación docente, sobre la forma de trabajo con los niños con discapacidad. Estas observaciones me permitieron darme cuenta que los niños especiales carecen de elementos de juego inclusivos”.
En qué consiste
Se trata de un tablero de fibrofácil con lugar para tres participantes más la docente. Cuenta con luces de colores azul, amarillo y rojo, además de una campana que se conecta con la luz violeta; también tiene incluidas descripciones en escritura Braille por si hace falta.
Este juego está destinado a niños no videntes y a niños con discapacidad auditiva.
“Con Waly los niños aprenden jugando y les da la posibilidad de fijar los conocimientos adquiridos.”, dijo la profesora.
“Y si bien fue concebido para niños con discapacidad, puede ser usado en todo el ámbito educativo”, comentó.
El juego es muy sencillo, se ubica a los niños frente al tablero y una docente realiza una pregunta, el niño que sepa la respuesta debe encender la luz para responder; eso trabaja la memoria, el conocimiento y su motricidad, en caso de estar afectada su capacidad visual deberá tocar un timbre.
Durante la Expo hubo una gran interacción del público: “Muchos niños se divirtieron con el juego, estaban con sus maestras, quien realizaba las preguntas; también lo disfrutaron niños con discapacidad y eso me dejó satisfecha”, dijo.