Se sabe que los clásicos entre Argentina y Uruguay, que tienen más de 100 años de historia, son siempre “calientes”, y el disputado en Tel Aviv no quiso ser menos, dando la nota un fuerte cruce entre Lionel Messi y Edinson Cavani, quien lo invitó a pelear al capitán argentino, que no se quedó atrás.
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Se sabe que los clásicos entre Argentina y Uruguay, que tienen más de 100 años de historia, son siempre “calientes”, y el disputado en Tel Aviv no quiso ser menos, dando la nota un fuerte cruce entre Lionel Messi y Edinson Cavani, quien lo invitó a pelear al capitán argentino, que no se quedó atrás.
Es que el partido se puso “picante” por las marcas personales, las piernas fuertes y los roces casi permanentes, pero extrañó que tras algunas palabras y risas compartidas entre Messi y Cavani, estuvieran a punto de terminar a las manos.
Cuando casi terminaba el primer tiempo, Messi tuvo un tiro libre a favor en la puerta del área, y Cavani a la pasada algo le dijo; la cara del capitán argentino se transformó, y debió intervenir Diego Godín para frenarlo cuando se le fue al humo al atacante charrúa.
Cavani, al leersele los labios, le dijo a Messi “vamos a pelear”, a lo que el capitán argentino, antes de ejecutar el tiro libre, ni lerdo ni perezoso, le respondió: “cuando quieras”, en tres ocasiones y de manera repetida.
El primer tiempo terminó y los jugadores se cruzaron camino a los vestuarios, pero los asistentes de ambas selecciones intervinieron para que no pasara a mayores.
Al final, tras el empate de Messi, hubo otro tumulto y manotazos entre rioplatenses.