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La idea cobró fuerza días atrás y se confirmó el fin de semana. Alberto Fernández y su equipo económico revivirán el 'dólar turista' mediante un recargo a los consumos realizados en el exterior o desde el país a prestadores de servicios extranjeros. A continuación, las claves para entender el alcance y la entrada en vigencia del nuevo esquema.
De cuánto será el recargo
La iniciativa del Gobierno propone un impuesto del 30% sobre el valor del dólar oficial. Si se considera la cotización de $63 que hoy ofrece el Banco Nación, el valor resultante es de $81,90.
De esta forma, un consumo de US$100 en el exterior implicará un pago de $6300 junto a $1890 en concepto de impuestos.
Qué operaciones quedan comprendidas
Según confirmó ayer el jefe de Gabinete Santiago Cafiero, el nuevo impuesto alcanzará a todos los consumos con tarjeta de crédito o débito realizados en el exterior o nominados en moneda extranjera. Incluye pasajes, hospedajes y gastos en otros países, además de compras realizadas en sitios del exterior. Según precisó Cafiero, también pagarían el 30% los pagos de servicios digitales o aplicaciones que se pagan en dólares, como Spotify, Netflix o Amazon Prime.
Además, el recargo alcanzaría a otros rubros que exceden el segmento turismo o esparcimiento. Entre otros, el recargo se impondría sobre el pago de cursos online dictados en el exterior, las licencias de uso de software o servidores, suscripciones a revistas y contenidos académicos o medicamentos, entre otros.
¿Se reintegra?
Si bien aún no hay definiciones concretas, el nuevo impuesto no sería reintegrable. Eso es una diferencia con respecto al dólar turista de la gestión de Cristina Kirchner. En aquella oportunidad, el recargo era tomado a cuenta del Impuesto a las Ganancias, y quienes estaban alcanzados por este impuesto recibían el reintegro por sus compras en dólares. Quienes no pagaban Ganancias recibieron el reintegro por parte de la AFIP recién en 2016.
Cómo impacta a quienes viven en el exterior
El alcance del impuesto para los argentinos que residen en el exterior dependerá del lugar donde tienen radicadas sus tarjetas. Si los pagos se realizan con un plástico vinculado a un banco en la Argentina, entonces sí pagarán el recargo del 30% a sus consumos. En cambio, si su tarjeta tiene sede en otro país, no estarán alcanzados por el impuesto.