Los socios del Club Atlético Nobleza deben vender empanadas para recaudar alrededor de 2 millones de pesos de un juicio laboral iniciado en el año 2.017 por un exconcejal que reclama el pago como casero, cortador de pasto y cuidador de las instalaciones del club entre los años 1993 y el 2015. De no llegar a poder pagar este monto reclamado judicialmente, la institución podría se rematada.
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Los socios del Club Atlético Nobleza deben vender empanadas para recaudar alrededor de 2 millones de pesos de un juicio laboral iniciado en el año 2.017 por un exconcejal que reclama el pago como casero, cortador de pasto y cuidador de las instalaciones del club entre los años 1993 y el 2015. De no llegar a poder pagar este monto reclamado judicialmente, la institución podría se rematada.
La preocupación se reavivó luego de sendas intimaciones enviadas por los abogados del demandante al club de sus amores para iniciar las audiencias judiciales como paso previo al cobro de la indemnización argumentada por Miguel Zárate. En este ítems no está estipulado el cobro de honorarios de abogados y demás sellados del juicio.
Ante esta disyuntiva, la actual comisión decidió salir a trabajar arduamente para recaudar dinero que evite un posible remate del club, en caso de no poder juntar el dinero demandado por Zárate.
"Parecía que todo iba a quedar en la nada, porque Zárate cuando era concejal en el año 2017, y ante el repudio de la población por su accionar contra el Club Nobleza, se había comprometido a no seguir la acción judicial. Pasó el tiempo, dejó de ser funcionario público, y se acordó del pleito reclamando actualización de montos", explicó Ramiro Ábalos presidente de la institución.
Cuando se inició el reclamo judicial hace dos años y medio, el excasero solicitaba la suma de 821 mil pesos y monedas. Argumentaba salarios adeudados, vacaciones, antigedad de 22 años e indemnización por despido. Pero el escándalo desatado por aquel entonces por tratarse de un concejal en funciones -que por medio de un juicio podía llevar a hacer desaparecer a una institución- el trámite judicial gozó de cierto auxilio del tiempo, por lo tanto parecía que Zárate había desistido de seguir adelante con el juicio.
A fines del año pasado la cuestión legal volvió a tomar vuelo. A tal punto se aceleró que este 8 de marzo habrá audiencia en sede judicial con la intención de llegar a un arreglo de cómo pagará la actualización de montos reclamados por el demandante.
"Sabíamos que iba a llegar este momento. Aquel compromiso de honor de este señor quedó olvidado en el tiempo. Hacer un juicio a un club hoy es fácil. Demostrar que vivió de prestado en su momento como un empleado contratado es descabellado. Su padre fue presidente del club, y por querer darle una mano, permitió que habitara por unos años una pieza. Nunca fue contratado, era un cuidador como se estila en numerosos clubes del interior. Lamentablemente no hay leyes que protejan a las instituciones de estas avivadas", resaltó Ramiro Ábalos.
Tanto el senador Esteban D'andrea y la diputada Mary Martínez han sido convocados para asistir al club. "Hemos solicitado su apoyo. Más sabiendo que el reclamante fue concejal en su momento por el frente político de la diputada, y luego funcionario del D'andrea en la municipalidad", dijo Ábalos.
En el 2015 se lo intimó al excuidador y canchero a desocupar la vivienda que ocupaba en las instalaciones del club. Después de dos años inició el proceso judicial. Primero solicitaba 821 mil pesos, y presentó como testigo a una concejal de aquel entonces.