Se arriesgan a pasar. A veces, cuando la impunidad y, según dicen, la suerte juega a su favor, llegan a destino. Sin embargo, desde que salen del punto de partida para llegar a otro la posibilidad de ser detenidos está latente. En la madrugada de ayer, un hombre de 34 años identificado por los investigadores como Víctor Javier Vargas, fue detenido en un control ubicado sobre la ruta nacional 34, kilómetro 1288, localidad de Urundel. Los sabuesos vincularon al sujeto con el transporte de más de 44 kilos de cocaína, tras ser atrapado quedó a disposición de la Justicia federal.
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Se arriesgan a pasar. A veces, cuando la impunidad y, según dicen, la suerte juega a su favor, llegan a destino. Sin embargo, desde que salen del punto de partida para llegar a otro la posibilidad de ser detenidos está latente. En la madrugada de ayer, un hombre de 34 años identificado por los investigadores como Víctor Javier Vargas, fue detenido en un control ubicado sobre la ruta nacional 34, kilómetro 1288, localidad de Urundel. Los sabuesos vincularon al sujeto con el transporte de más de 44 kilos de cocaína, tras ser atrapado quedó a disposición de la Justicia federal.
Cerca de las 3 de ayer un vehículo marca Toyota Corola, color gris, circulaba en sentido cardinal de Norte a Sur, sobre la ruta nacional 34, antes de llegar al control mencionado intentó ingresar a Urundel por un camino alternativo que estaba bloqueado, y no le quedó otra que retroceder y dirigirse hacia el kilómetro 1288 donde se llevaba a cabo un control. Consultado por el destino, el hombre de apellido Luna señaló que se dirigía hacia Tucumán, dijo ser oriundo de Orán.
Para los efectivos el hombre exponía cierto grado de nerviosismo a la vez que estaba efusivo ante el control que no pudo evitar, señalaba tener todo en regla. Entre la información que brindó sostuvo que iba a ingresar a la localidad de Urundel para buscar a un "pasajero" y seguir a Tucumán. Los policías observaron que detrás del Corola se acercaba una camioneta, Ford Ranger, con lo cual habilitaron el paso.
La camioneta, patente OHZ-026, era conducida por Javier Vargas, de quien los uniformados también sospecharon desde un primer momento. Su forma de conducir previo a llegar al control pero sobre todo los nervios sin disimular frente al interrogatorio provocó que los policías efectuaran un chequeo minucioso del rodado. Mientras eso pasaba, el sospechoso recibió al menos dos llamados a su teléfono celular.
"¿Dónde estás, por qué no llegás?" se escuchó primero, algunos minutos después: "¿Te estamos esperando, por qué no llegás?" Sospecharon que el hombre que había llamado reclamando la presencia de Vargas, era el mismo que minutos antes había pasado en un vehículo alta gama. Mientras, el conductor de la Ranger estaba acorralado, sin escapatoria.
Tras ir a la búsqueda de más implicados, los policías encontraron bultos con 44 paquetes tipo rectangulares con la sustancia, bolsas que eran trasladadas por dos hombres quienes al escuchar la voz de alto se dieron a la fuga.
Voz de alto y detonaciones
Efectivos del puesto Urundel junto a la colaboración del personal de Drogas Peligrosas se abocó a la búsqueda de más sospechosos, cuando caminaban por caminos alternativos lindantes a la ruta nacional 34 observaron la presencia de dos personas, tras dar la voz de alto los hombres respondieron con detonaciones de arma de fuego y comenzaron a correr. Los uniformados observaron cómo los delincuentes se perdían en la espesura del monte mientras se desprendían de objetos.
Realizaron el rastrillaje en el lugar y encontraron dos bolsas tipo arpilleras color negro, en su interior había bultos encintados de manera compacta, al abrirlos hallaron 44 envoltorios rectangulares que contenían la sustancia estupefaciente que luego de ser testeada dio positivo para cocaína.