¿Quieres recibir notificaciones de alertas?

23°
28 de Marzo,  Salta, Centro, Argentina
PUBLICIDAD

Muertes en el Chaco salteño: “Nos planteamos cómo convertimos esto en una oportunidad”

Entrevista a Olga Isaza, representante adjunta de UNICEF  Argentina.
Jueves, 06 de febrero de 2020 01:47

La idea que ronda es que las seis muertes de los niños del Chaco salteño durante enero pasado fueron inevitables. Murieron por ser wichis. A eso se alude cada vez que se mencionan los “problemas históricos estructurales” de esa región. Esta vez, la fatalidad podría no ser en vano.
La conmoción que causó a nivel nacional la noticia de los fallecimientos de los niños por desnutrición y por causas relacionadas con la extrema pobreza de las comunidades indígenas del norte de la provincia activó la preocupación de diferentes organismos estatales y no gubernamentales que antes tenían menos participación en la problemática. Es el caso de la Organización de la Naciones Unidas (ONU) y su sistema para el sector de la infancia Unicef, que desde ayer se encuentra con una comitiva en Tartagal para conocer el drama de los grupos originarios de primera mano.
Olga Isaza, representante adjunta de Unicef Argentina, encabeza esa delegación y hoy se reunirá con el gobernador Gustavo Sáenz junto a autoridades de las ONU para definir líneas de acción en Rivadavia, San Martín y Orán, departamentos declarados por la Provincia en emergencia sociosanitaria.
“Queremos conocer de primera mano cómo los actores locales están entendiendo y explicando la desnutrición que están viviendo los niños y las niñas en la región. Nosotros sabemos que este es un problema crónico, porque no es un hecho coyuntural que pasó en un solo momento, creemos que es necesario ayudar a las instituciones responsables a diseñar soluciones más duraderas”, explicó Isaza a El Tribuno. 

Alcanzaste el límite de notas gratuitas
inicia sesión o regístrate.
Alcanzaste el límite de notas gratuitas
Nota exclusiva debe suscribirse para poder verla

La idea que ronda es que las seis muertes de los niños del Chaco salteño durante enero pasado fueron inevitables. Murieron por ser wichis. A eso se alude cada vez que se mencionan los “problemas históricos estructurales” de esa región. Esta vez, la fatalidad podría no ser en vano.
La conmoción que causó a nivel nacional la noticia de los fallecimientos de los niños por desnutrición y por causas relacionadas con la extrema pobreza de las comunidades indígenas del norte de la provincia activó la preocupación de diferentes organismos estatales y no gubernamentales que antes tenían menos participación en la problemática. Es el caso de la Organización de la Naciones Unidas (ONU) y su sistema para el sector de la infancia Unicef, que desde ayer se encuentra con una comitiva en Tartagal para conocer el drama de los grupos originarios de primera mano.
Olga Isaza, representante adjunta de Unicef Argentina, encabeza esa delegación y hoy se reunirá con el gobernador Gustavo Sáenz junto a autoridades de las ONU para definir líneas de acción en Rivadavia, San Martín y Orán, departamentos declarados por la Provincia en emergencia sociosanitaria.
“Queremos conocer de primera mano cómo los actores locales están entendiendo y explicando la desnutrición que están viviendo los niños y las niñas en la región. Nosotros sabemos que este es un problema crónico, porque no es un hecho coyuntural que pasó en un solo momento, creemos que es necesario ayudar a las instituciones responsables a diseñar soluciones más duraderas”, explicó Isaza a El Tribuno. 

No es la primera vez que vienen desde Unicef a Salta, inclusive están trabajando mediante un convenio con la Provincia desde 2016. ¿Cuál es la evaluación que tienen desde la institución, anterior a lo que están encarando ahora, sobre el Chaco salteño?
Desde hace varios años estamos en Salta, pero no en la región norte de la provincia específicamente, estamos más hacia la capital y hacia el este. Tenemos un trabajo muy interesante para el desarrollo de escuelas rurales secundarias mediadas por tecnología para garantizar que los y las adolescentes que viven en parajes muy dispersos y rurales puedan concluir su secundario y puedan aprender adecuadamente. También hemos estado trabajando en temas de salud adolescente, nos interesa mucho la reducción del embarazo en adolescentes y hemos trabajado en el mejoramiento de los servicios, de las asesorías para los adolescentes. Igual estamos trabajando muy de la mano con el Ministerio de Desarrollo para ver qué está pasando con la AUH (Asignación Universal por Hijo), si es que está llegando a todos los niños que tiene que llegar. Digamos que siempre hemos tenido históricamente una colaboración muy cercana con las diferentes autoridades, pero realmente hay niños que se están quedando atrás, como las comunidades indígenas, y parte de nuestra misión central como agencia son esas poblaciones y ver qué otras cosas podemos hacer conjuntamente.

“Estamos entendiendo de primera mano cuál es la situación. Antes no podemos prometer una intervención de cualquier naturaleza”.

Esta nueva misión de Unicef en Salta también tiene que ver con el comunicado que emitió la ONU recientemente a raíz de la muerte de los seis niños de la etnia Wichi en que se insta a generar soluciones de mediano y largo plazo sobre esta problemática, ¿cuáles serían esas soluciones?
Los problemas estructurales tienen que ver con la disponibilidad de alimentos, con agua potable y saneamiento básico, con educación intercultural, con acceso a servicios de salud de una manera más cercana a las personas y reconociendo las diferentes culturas que hay en la zona, eso es lo que hemos conversado durante la jornada de hoy (por ayer) con los diferentes caciques, con grupos de mujeres y otras personas de la región y nos pareció que eso tiene mucho sentido, de decir que hay una intervención intercultural y los temas estructurales, como el del agua, etcétera, que deberán incorporarse dentro de estas propuestas que se formulen.

Y cuál es la sensación que le dejan las reuniones que mantuvieron con caciques y demás personas de las comunidades, ¿cree que estas muertes se pudieron haber evitado?
Esto es un tema estructural, un tema crónico, no solo unas muertes que se presentaron una única vez, los niños se vienen muriendo, entonces lo que hemos constatado es que es necesario reforzar un diálogo que ya se viene haciendo con las comunidades indígenas. Creemos que debe haber una adaptación de las políticas para que tengan una base intercultural más efectiva, mientras no haya un acercamiento más estratégico al reconocimiento cultural va a ser difícil que las soluciones sean apropiadas para las comunidades y, al mismo tiempo, las comunidades también tienen que cohesionarse más, organizarse mejor para poder interactuar de una manera más efectiva con los organismos del Estado. Creemos que eso son lecciones que nos deja esta visita. Es también muy impresionante ver cómo los grupos de mujeres se han organizado entre ellas mismas para cuidar a sus comunidades, ellas nos están relatando unas relaciones muy desiguales de poder entre hombres y mujeres, creemos que hay un tema ahí que se debe mirar. 

Desde la experiencia de Unicef, que tiene presencia en lugares de  los más vulnerables del mundo, ¿la problemática que usted describe se resuelve más con dinero o bien se necesita mayor compromiso de las autoridades?
El dinero es importante, pero no solamente la cantidad sino cómo se invierte, que tal vez es lo más importante para definir en este momento, saber cuáles son las intervenciones estratégicas que han demostrado ser efectivas para casos como estos. Soluciones, por ejemplo, para el tema del agua potable y saneamiento básico se van a dar para las comunidades que son dispersas o rurales, cómo solucionar el tema de la empleabilidad en la zona, seguramente eso implica también un diálogo con las empresas que están presentes en la región. Está claramente demostrado que tanto una adaptación intercultural de los servicios, como un diálogo más fluido entre los actores presentes en el territorio, son definitivos para el éxito de las intervenciones. 

Usted bien lo dijo: las muertes de los seis niños que ocurrieron en enero no son, desafortunadamente, excepcionales, entonces, ¿por qué piensa que hubo esta suerte de sorpresa o el repentino interés que despertó en la opinión pública lo que sucedió en el chaco salteño?¿Antes faltó información de lo que estaba pasando o se ocultaba la situación?
Esa fue una pregunta que nosotros mismos le hicimos a la gente con la que nos hemos reunido, por qué esto tuvo una visibilidad tan importante si es desafortunadamente algo que pasa generalmente y ellos mismos nos decían que evidentemente los medios de comunicación y las facilidades de publicación de hoy en día hacen que todas las noticias se conozcan más fácilmente por una parte, pero por otro lado nosotros también entendemos que cualquier muerte, la muerte de un solo niño en cualquier momento es una razón suficiente para que haya una visibilización muy grande y lo que nos planteamos es cómo convertimos esto en una oportunidad para acelerar los resultados para los niños. Si esto venía pasando y esta visibilización se dio, bueno, aprovechemos entre todos este momento para realmente darle un impulso mayor, seguramente esto sirve para reforzar acciones, para ver cosas que no se estaban viendo, entonces veámoslo como una oportunidad para solucionar problemas estructurales.

¿Cuál es la ayuda que puede proporcionar Unicef ante esta situación?
Lo que estamos haciendo es hablando y entendiendo de primera mano la situación. Es lo que consideramos más serio, no podemos prometer una intervención de cualquier naturaleza sin antes conocer cuáles son las condiciones. Mañana (por hoy) tenemos una reunión con el gobernador de Salta para justamente ver cómo avanzamos en el diseño de soluciones duraderas. Yo diría que esa es la contribución más importante que nosotros podemos dar. Como bien usted lo mencionaba, esto no es un tema necesariamente de recursos económicos sino de poner al servicio las intervenciones efectivas que nosotros conocemos que existen para que se refuercen las que se vienen haciendo porque también es muy importante resaltar que en la provincia de Salta tanto la mortalidad infantil como la materna han disminuido, obviamente esa disminución no sucede de la misma manera en todo el territorio.

De hecho en todo el mundo disminuyeron los indicadores de mortalidad infantil y materna, sería aún más grave que no se haya bajado también acá...
Sería un indicador muy negativo, pero igual es importante reconocerlo.
.
.
.
 

PUBLICIDAD
PUBLICIDAD
PUBLICIDAD