De repente se puso gris el cielo en Guachipas y la tormenta se desató con una fuerza inusitada. Pasadas las seis de la tarde dele miércoles el viento, el granizo y la lluvia dejaron alrededor de veinte viviendas anegadas con barro y agua, vehículos arrastrados por el torrente del arroyo La Florida, caídas de árboles y cables. Algunos lugareños dudan si el arroyo creció por el caudal caído o por posibles desmontes en las serranías.
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De repente se puso gris el cielo en Guachipas y la tormenta se desató con una fuerza inusitada. Pasadas las seis de la tarde dele miércoles el viento, el granizo y la lluvia dejaron alrededor de veinte viviendas anegadas con barro y agua, vehículos arrastrados por el torrente del arroyo La Florida, caídas de árboles y cables. Algunos lugareños dudan si el arroyo creció por el caudal caído o por posibles desmontes en las serranías.
Dos integrantes de la familia Lezcano, Matías de 12 años y su papá Ramón de 45, fueron rescatados por otros vecinos, al ser arrastrados por la masa de agua y barro que cruzaba la localidad de Guachipas en dirección este a oeste. La última tormenta recordada por los lugareños de esta magnitud data del año 1995, cuando el arroyo La Florida que nace en las serranías del saliente de Guachipas se desbordó e inundó el pueblo.
Por aquel entonces se construyeron murallones a ambos márgenes de este arroyo que durante todo el año resulta estéril hasta para escurrir las aguas de lluvias. Por ese motivo la población lo usó como calle canal, con tránsito permanente, aunque con murallones de 60 centímetros para evitar desbordes hacia los barrios contiguos.
"Fue tremenda la tormenta, de repente el arroyo bajó con mucho barro y fuerza en medio de la lluvia. A diferencia de hace 25 años, cuando pasada la tormenta recién bajó la crecida. Ayer (este miércoles) fueron 15 minutos donde la naturaleza mostró su fuerza", contó el intendente Néstor Parra, aún impactado por las consecuencias.
Sobre los evacuados, Parra mencionó que "junto con el Ministerio de Seguridad de la Provincia pusimos en marcha un operativo preventivo de asistencia a la familias afectadas. Los perjudicados fueron muchos. Pero podemos decir que solo seis viviendas tienen aún barro y daños en sus estructuras. Esas familias terminaron durmiendo en las casas de sus familiares".
El arroyo La Florida está con murallones en su recorrido por el pueblo. Las aguas arrastrando el sedimento en algunos sectores superaron la pared de piedra y hormigón armado de 60 centímetros.
La fuerza del torrente arrastró un pesado tractor y otro automóvil de pequeño porte estacionados sobre esta calle canal. Metros adelante quedaron varados y terminaron taponando este desage. El agua y el barro desbordaron en ese sector ingresando a viviendas y calles del ingreso del pueblo.
La lupa sobre el arroyo
La localidad de Guachipas, ubicada a 110 kilómetros de Salta capital, está rodeada de cerros al este y al norte. Hacia el oeste está el río homónimo que desemboca en el Cabra Corral. La pendiente del cuestionado arroyo La Florida corre de este a oeste. La construcción de los murallones para contener las aguas que cruzan de vez en cuando el pueblo ha servido para prevenir catástrofes derivadas de tormentas y crecidas.
"Dicen que un canal podría evitar inundaciones como la del miércoles. Pero la posible desembocadura en el río Guachipas tendría sus complicaciones, porque el cauce está más elevado que ciertos sectores del pueblo".