La Asociación de Diálisis de Salta (CEPRIDIASA) salió a anunciar que no podrá continuar con las prestaciones “por la ausencia de convenio con el Ministerio de Salud provincial en un escenario de pandemia”.
Al nuevo estado de situación la explicó el doctor Mario Espeche, quien es el presidente de la asociación, y que salió a alertar a toda la comunidad sobre la dificultad de los prestadores de diálisis por la falta de convenio.
“Hace más de un año que iniciamos conversaciones con el IPS (Instituto Provincial de Salud), con el programa Incluir Salud y con el Ministerio de Salud Pública de la Provincia. El 6 de junio firmamos el convenio con el IPS; un acuerdo que estaba hablado, consensuado, pactado. Esta semana teníamos que firmar con el MSP y con Incluir Salud y vinieron con otro texto, con otro convenio; nada que ver con el había arreglado de palabra. En el nuevo texto hay cuestiones burocráticas, obstáculos que nos colocan en una indefensión jurídica, en un contexto de plena pandemia. Al convenio así como está no lo vamos a firmar el 100 por ciento de los prestadores”, dijo Espeche.
La advertencia al Ministerio de Salud es por la gravedad de no tener un convenio de prestaciones de diálisis, especialmente en un escenario de pandemia y lo hace único responsable de la situación de indefensión a la que exponen a pacientes y a los trabajadores de la salud.
Hasta ahora las prácticas de diálisis se convirtieron en un verdadero “tetris” por el protocolo de prevención por el Covid-19. Hablamos de una mayoría de pacientes de riesgos que llegan desde todo el territorio provincial hasta nuestra ciudad. La circulación para esas personas, en plena cuarentena, fue traumática.
Para tener una idea de la problemática se debe decir que la cantidad de personas en los traslados se redujeron un 50 por ciento. En los controles, como los de Aunor pedían los estudios de hisopado con demoras de hasta 6 horas, entonces tenían que aumentar las horas de trabajo porque los turnos se extendían, más horas de feriados; todo se les complicó.
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La Asociación de Diálisis de Salta (CEPRIDIASA) salió a anunciar que no podrá continuar con las prestaciones “por la ausencia de convenio con el Ministerio de Salud provincial en un escenario de pandemia”.
Al nuevo estado de situación la explicó el doctor Mario Espeche, quien es el presidente de la asociación, y que salió a alertar a toda la comunidad sobre la dificultad de los prestadores de diálisis por la falta de convenio.
“Hace más de un año que iniciamos conversaciones con el IPS (Instituto Provincial de Salud), con el programa Incluir Salud y con el Ministerio de Salud Pública de la Provincia. El 6 de junio firmamos el convenio con el IPS; un acuerdo que estaba hablado, consensuado, pactado. Esta semana teníamos que firmar con el MSP y con Incluir Salud y vinieron con otro texto, con otro convenio; nada que ver con el había arreglado de palabra. En el nuevo texto hay cuestiones burocráticas, obstáculos que nos colocan en una indefensión jurídica, en un contexto de plena pandemia. Al convenio así como está no lo vamos a firmar el 100 por ciento de los prestadores”, dijo Espeche.
La advertencia al Ministerio de Salud es por la gravedad de no tener un convenio de prestaciones de diálisis, especialmente en un escenario de pandemia y lo hace único responsable de la situación de indefensión a la que exponen a pacientes y a los trabajadores de la salud.
Hasta ahora las prácticas de diálisis se convirtieron en un verdadero “tetris” por el protocolo de prevención por el Covid-19. Hablamos de una mayoría de pacientes de riesgos que llegan desde todo el territorio provincial hasta nuestra ciudad. La circulación para esas personas, en plena cuarentena, fue traumática.
Para tener una idea de la problemática se debe decir que la cantidad de personas en los traslados se redujeron un 50 por ciento. En los controles, como los de Aunor pedían los estudios de hisopado con demoras de hasta 6 horas, entonces tenían que aumentar las horas de trabajo porque los turnos se extendían, más horas de feriados; todo se les complicó.
“El texto que nos quieren hacer firmar habla de certificados de residencia, de estudios psicológicos y asistencia social en donde nosotros no tenemos nada que ver. Son tres renglones que nos complican totalmente y que son atribuciones del Ministerio de Salud Pública. Nosotros nos concentramos en las atenciones de nuestros pacientes que ya con eso es demasiado en estos tiempo. Nosotros atendemos a todas las personas por igual y no tenemos que andar pidiendo requisitos”, dijo Espeche.
En cuanto a la magnitud, al menos hay 500 personas que se hacen diálisis con el Ministerio y con Incluir Salud. Esos 500 pacientes se deben realizarse las prácticas 3 veces a la semana; es decir que al mes son unas 6.500 diálisis que deben realizarse en la provincia.
Son pacientes, en su gran mayoría adultos mayores, con más de 65 años, que sufren por años de hipertensión arterial o diabetes tipo II, que son extremadamente vulnerables. Parece ser entonces una cuestión de letra chica y sentido común.
“Ahora no estamos hablando de deudas, de dinero. Estamos hablando de tres renglones que no estaban charlados, en el acuerdo de palabra y que ahora los pusieron. Trabajar así en cuarentena es imposible por los riesgos que corremos todos. Hago un llamado a la ministra Medrano para que modifique el texto y volamos a lo conversado durante un años, pero básicamente a lo que ya firmamos con el IPS. No podemos firmar con ellos una cosa (ya pautada) y a último momento firmar otra con otros dos. Pedimos cambiar esos renglones de cuestiones administrativas”, dijo el médico.
Para finalizar, Espeche dijo que “la situación de los pacientes de diálisis ya era grave y hoy nos preocupa aún más no tener un convenio que asegure la prestación porque no lo vamos a firmar”.