El fútbol argentino volvió a ponerse en marcha tras casi cinco meses de inactividad, y ayer la mayoría de los equipos de la Liga Profesional, más Tigre, de la Primera Nacional, retomaron los entrenamientos, tras realizarse los testeos previos, que arrojaron varios casos de coronavirus, en todos los casos, futbolistas asintomáticos.
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El fútbol argentino volvió a ponerse en marcha tras casi cinco meses de inactividad, y ayer la mayoría de los equipos de la Liga Profesional, más Tigre, de la Primera Nacional, retomaron los entrenamientos, tras realizarse los testeos previos, que arrojaron varios casos de coronavirus, en todos los casos, futbolistas asintomáticos.
Haciendo la sumatoria entre los contagios detectados el domingo previo a la vuelta, y ayer, ya son 23 los infectados de COVID-19 confirmados, solo en la principal categoría.
El caso más resonante es el del defensor de River, Gonzalo Montiel, además de tres resultados positivos en Argentinos Juniors y dos en Racing.
En el caso de Montiel, dio positivo en el test serológico que se le realizó ayer antes del reinicio de los entrenamientos y se retiró a su casa para permanecer aislado y en observación hasta que se le practique un nuevo examen PCR.
Es el segundo positivo en el millonario, tras conocerse el sábado el caso del arquero juvenil Ezequiel Centurión.
Las posibles causas del positivo son tres: que se trate de un error en el análisis de sangre, que haya tenido el virus asintomático o que se haya contagiado el fin de semana.
En el bicho de La Paternal, el delantero Lucas Ambrogio, el volante David Zalazar y un empleado de mantenimiento dieron positivo tras los hisopados realizados la semana pasada. Argentinos suspendió su vuelta a las prácticas, ya que no recibió el total de los resultados de los PCR realizados el jueves.
Previo a los testeos, el bicho ya tenía confirmados dos casos: el juvenil Gabriel Florentín y el venezolano Daniel Saggiomo.
Racing, que fue uno de los últimos en dar los resultados, confirmó dos casos positivos: Alexis Soto y Thiago Banega.
En tanto, Boca tuvo un único caso: Agustín Almendra. Independiente, que ya conocía el contagio de Mauro Molina, sumó tras los exámenes generales a Fabricio Bustos.
Junto a Argentinos, el otro club de Primera División más afectado es Godoy Cruz de Mendoza, que ya había confirmado a cuatro jugadores contagiados: Valentín Burgoa, Agustín Álvarez, Marcelo Freites y Agustín Manzur.
Tres contagiados tiene Banfield (Federico Torres, Franco Quinteros y Nicolás Linares). Vélez suma dos: Ricky Álvarez y Thiago Almada, mientras que otros clubes que no zafaron de la pandemia son Defensa y Justicia (Mauricio Duarte), Estudiantes (Mauricio Guzmán) y Newell’s (Manuel Guanini). A esos hay que sumarle 3 casos de Tigre, de la Primera Nacional: Agustín Diego Morales e Iván Bolaño.
Los "de negro" zafaron
El plantel arbitral de la Primera División del fútbol argentino se sometió ayer a los testeos serológicos de detección de coronavirus de cara al regreso a los entrenamientos de los árbitros, programados para hoy.
Más de cincuenta árbitros, árbitras y asistentes acudieron por la mañana al Centro de Alto Rendimiento la Asociación Argentina de Árbitros para realizarse el test serológico para poder comenzar su preparación. Luego, la Asociación de Árbitros (AAA) desde su cuenta oficial de Twitter informó que todos los estudios dieron como resultado negativo.
Los testeos fueron supervisados por el personal del Departamento Médico de la AFA y por el Director Nacional de Arbitraje, Federico Beligoy, quien también se sometió a la prueba y dio negativo de coronavirus.
Los árbitros retomarán la labor con el mismo protocolo que aprobó el Gobierno nacional para los equipos de Primera.