Nuevas imágenes se difundieron anoche vinculadas al ataque que sufrieron los integrantes de una familia Qom el 31 de mayo en la localidad de Fontana, en Chaco, cuando, durante un allanamiento en su vivienda, un grupo de policías los golpeó y los amenazó con prenderlos fuego.
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Nuevas imágenes se difundieron anoche vinculadas al ataque que sufrieron los integrantes de una familia Qom el 31 de mayo en la localidad de Fontana, en Chaco, cuando, durante un allanamiento en su vivienda, un grupo de policías los golpeó y los amenazó con prenderlos fuego.
De acuerdo con la denuncia, los policías de la comisaría tercera de la localidad de Fontana ingresaron durante la madrugada al domicilio de una mujer que vive con su padre y sus hijos, una adolescente de 16 años y un joven de 19, a quienes se llevaron detenidos junto a una chica de 18 años y otro muchacho de 20.
En un video registrado por las cámaras de seguridad, se ve el momento en el que la adolescente de 16 años ingresa detenida a la comisaría tercera de la localidad de Fontana y es fuertemente golpeada por un policía. La menor tras el ataque estuvo en estado de shock por las vejaciones.
La hija de la dueña de casa había contado en aquel momento que los policías los atacaron a patadas y los amenazaron al decirles: "Ya les tiramos alcohol, ¿ahora quién las prende fuego?". Mientras que Elsa, la madre de familia, había relatado: "La agarraron a mi hija del cabello y la arrastraron, alcancé a prenderme de ella y entre seis policías nos agarraron y ahí un oficial me pegó con la 9 (pistola calibre nueve milímetros) en el rostro".
En un principio, la Justicia había detenido a cuatro agentes, identificados como el oficial subayudante Cristian Eduardo Foschiatti, el sargento Cristian Omar Benítez, el cabo Cristian Ariel Flores y el agente Orlando Sergio Cabrera. A quienes luego les otorgaron el beneficio de la prisión domiciliaria en el marco de la pandemia del Covid-19. Más tarde, la cúpula de la policía de Chaco presentó su renuncia en julio ante el gobierno de Jorge Capitanich, tras el rechazo de la administración provincial a la reincorporación de los cuatro policías imputados por violencia institucional
La salvaje golpiza
Los agentes de la Policía del Chaco están imputados por ingresar sin orden de allanamiento a la casa de una familia de la comunidad Qom y atacarlos, con altos niveles de violencia y un grado de ensañamiento anclado en la discriminación racial, según lo demuestran los registros fílmicos de los propios damnificados.
El hecho ocurrió el domingo 31 de mayo, a las 4 de la mañana, en Fontana, una localidad cercana del Gran Resistencia, cuando, al parecer, buscaban a varios jóvenes que habrían apedreado la comisaría, a cuatro cuadras de allí.