El ministro de Seguridad de la Provincia, Juan Manuel Pulleiro, aseguró a El Tribuno que "la situación de la cárcel de Metán está controlada", y "que se tomaron todas las medidas sanitarias para proteger la salud de los internos y del personal", debido a los casos confirmados de COVID-19.
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El ministro de Seguridad de la Provincia, Juan Manuel Pulleiro, aseguró a El Tribuno que "la situación de la cárcel de Metán está controlada", y "que se tomaron todas las medidas sanitarias para proteger la salud de los internos y del personal", debido a los casos confirmados de COVID-19.
"Quiero llevar tranquilidad a toda la ciudadanía porque venimos trabajando en la prevención desde el inicio de la pandemia y no tuvimos casos hasta el mes de julio en la provincia. Comenzaron a darse en agosto, tanto en detenidos como en penitenciarios. Actualmente la situación está bajo control, porque se cumple con los protocolos", destacó el funcionario.
"En el hospital de Metán teníamos dos detenidos, uno dio positivo y el otro negativo. En esa localidad también tenemos cinco guardiacárceles positivos. Esto en la cifra de la provincia nos da un porcentaje muy bajo, que significa que hemos tomado las medidas adecuadas, en lo que respecta a higiene y cuidados de los detenidos y del personal", remarcó Pulleiro.
Detalló que en la provincia de Salta hay una población carcelaria de alrededor de 3.600 detenidos y en total tenemos 15 casos positivos en todas las unidades carcelarias. "Lo que significa un 0,4 %, que en términos porcentuales y para la gente de Epidemiología es altamente positivo, porque es una cifra muy baja, menor al 1%, lo que significa que venimos haciendo las cosas bien", indicó.
En lo que respecta a los guardiacárceles, confirmó que hay 150 contagiados y otros 370 en aislamiento por contactos estrechos, de los que se hace un seguimiento.
Pulleiro dijo que agradece la comprensión de los familiares de los detenidos. "Queremos seguir llevándoles calma y tranquilidad porque estamos tomando todas las medidas de bioseguridad para proteger a las personas privadas de la libertad. "Las visitas, por ahora, tuvieron que ser suspendidas debido a la situación que estamos atravesando. Es para reducir al máximo la posibilidad de contagios", destacó.
Tensión en el penal
Debido a los contagios, algunos presos de la Unidad Carcelaria 2 de Metán anticiparon que hoy podrían llevar adelante una protesta para exigir mayor seguridad sanitaria. En el penal metanense actualmente hay alojados 143 internos.
"Eso sería muy desafortunado y les pido a los internos que reconsideren esa posibilidad. Me dijeron que podrían hacer una huelga de hambre y esa medida no es conducente. Se van a debilitar y tienen que estar fuertes en estos momentos. Yo ya he recibido las inquietudes de sus familiares y quiero llevarles tranquilidad a todos", destacó el ministro Pulleiro.
Por su parte, el director de la Unidad Carcelaria 2 de Metán, Héctor Omar Ocampo, confirmó oficialmente que cinco guardiacárceles y un preso dieron positivo para COVID-19. Además dijo que hay 20 efectivos penitenciarios aislados de manera preventiva.
"La situación está controlada. Los internos tienen asistencia por parte de un médico y dos enfermeros que realizan los controles. Estamos haciendo todo lo que indican los protocolos para estas situaciones", aseguró Ocampo a El Tribuno.
"Creo que tuve COVID-19"
Por otra parte, un interno alojado en la cárcel de Metán se comunicó con este medio y aseguró que la situación allí adentro es de mucha tensión. "Ya hay contagios y está faltando higiene porque, por ejemplo, no hay productos de limpieza. Los jueces no están trabajando, no hay beneficios para nadie y no están otorgando libertades. Lamentablemente la jefatura de esta unidad no nos da soluciones, cortaron las visitas y nos ocultan todo", dijo el preso, telefónicamente, desde el interior del penal metanense.
"Algunos muchachos están asegurando que el miércoles (por hoy) van a iniciar una protesta pacífica, con una huelga de hambre", aseguró.
"Lamentablemente el Servicio Penitenciario no posee infraestructura para aislarnos como corresponde para evitar contagios masivos. Lo único que podemos hacer es esperar a que pase todo. Hay otros presos con síntomas y muchos no tienen barbijos. Yo estuve dos semanas enfermo con dolor de cabeza y de cuerpo, pérdida de olfato y de gusto. Lo único que me dieron fue un antifebril y el enfermero la mayoría de las veces no atiende. Probablemente yo haya tenido COVID-19, pero no lo sé porque jamás me aislaron ni me hicieron análisis", indicó el preso, que pidió reserva de su nombre por temor a represalias.