La muerte violenta de una joven pareja del Valle de Siancas fue el tema del día en la zona de El Bordo y General Güemes.
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La muerte violenta de una joven pareja del Valle de Siancas fue el tema del día en la zona de El Bordo y General Güemes.
La luz del día mostró la verdadera dimensión de una tragedia vial que se produjo en la noche del sábado y recién se esclareció -a medias- en la noche del día lunes. En todo ese tiempo, las dos personas fueron buscadas como desaparecidas y las redes sociales fueron el epicentro de las más variadas hipótesis sobre la suerte de la pareja.
En medio de la desesperación de los familiares las personas desaparecidas fueron halladas: una en el interior de una represa, flotando; en tanto, el hombre, sobre el talud interno del ingenio hidráulico. El hallazgo, como otros tantos de gente desaparecida en Salta, se produjo de noche y las pericias de rigor, tanto de criminalísticas como del CIF, se hicieron también en ese horario. Muchas personas se dieron cita al lugar y dada la oscuridad nadie sabe qué pisaron o contaminaron y qué no.
Lo que se sabe es que la motocicleta se encontró dentro del pequeño espejo de agua, al igual que el cuerpo de la docente María Elena Gutiérrez. En tanto, el conductor de la moto Gilera enduro, Daniel Argañaraz, no se encontraba en el agua. Fuentes de seguridad deslizaron que el siniestro vial se produjo a gran velocidad y que la moto, luego de atravesar a campo traviesa la banquina y unos 20 metros de rastrojo desparejo y duro, se elevó y pasó por sobre el talud de unos 2,5 metros de altura, depositando el vehículo en la represa, a la acompañante también y al conductor en una de las orillas internas, lejos de la vista desde las rutas 12 y 122.
La mecánica del accidente estaría fundada en una cámara de seguridad que habría captado las luces del impacto, pero no la visión completa de la escena.
La muerte violenta de Gutiérrez y Argañaraz quedó en el más absoluto de los misterios.
Sí se sabe que desde la localidad de El Sauce, el sábado a la noche, salieron dos parejas en sendas motocicletas y que una de ellas llegó sin novedad a El Bordo, mientras la pareja constituida por Argañaraz y Gutiérrez jamás llegó y desde entonces nadie los vio con vida.
Sorprendentemente, a solo metros del lugar del impacto existen viviendas, la violencia del choque contra el muro debió producir además de ruido, el desguace de la motocicleta, y obviamente habría dejado las improntas de un siniestro sin antecedentes en la provincia.
Todo esto fue material de innumerables tertulias, ya que en los antecedentes de uno de los integrantes de la pareja existen nexos con actividades ilícitas penadas por el fuero federal.
La investigación sobre el singular hecho sigue su curso y se cree que podría esclarecerse en las próximas horas, cuando se confirmen los resultados de las correspondientes autopsias.
Por el momento, lo único que se sabe de manera pública es que las dos personas fueron halladas sin vida, una flotando en la represa en tanto la otra en el talud de la misma.
El accidente, si fue tal, se habría producido en horas de la noche del sábado y el hallazgo de los cuerpos fue notificado oficialmente cerca de las 20 del día lunes, cuando la luz del sol era casi inexistente.
Oficialmente se presume que se trató de un extraño siniestro vial que se cobró la vida de dos motociclistas. En las próximas horas se conocerá el informe técnico final de la mecánica del accidente.