A partir de este lunes, quedó definido el congelamiento de medicamentos por 60 días en todo el país y la decisión ya recibió fuertes críticas de parte del sector de las farmacéuticas. Consideran que esta medida se ha probado un montón de veces, y lo único generó es desabastecimiento.
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A partir de este lunes, quedó definido el congelamiento de medicamentos por 60 días en todo el país y la decisión ya recibió fuertes críticas de parte del sector de las farmacéuticas. Consideran que esta medida se ha probado un montón de veces, y lo único generó es desabastecimiento.
También criticaron uno de los puntos claves de este acuerdo del Gobierno nacional con los laboratorios porque genera incertidumbre en las farmacias y que implica retrotraer el precio de los remedios al primero de noviembre.
Ante esta situación, desde la Cámara de Farmacias de Salta (CPFS), todavía no saben como actuar ya que muchos medicamentos fueron adquiridos entre el 1 y el 8 de noviembre, y se hicieron con una suba promedio del 3%. Desde la Cámara aclararon que no todos los medicamentos realizaron un incremento.
“La gran disyuntiva nuestra, es ¿que pasó con lo que nosotros pagamos?. Esto nos pasó una vez, y los que quedamos siempre pagando el pato fuimos las farmacias. Nunca nos devolvieron lo que nosotros pagamos. Esta vuelta, creo que va a pasar lamentablemente lo mismo porque, se imagina, que el poder nuestro de fuego es muy bajo en relación a lo que pueden tener los laboratorios”, expresó Francisco Puló, vicepresidente de la Cámara de Farmacias de Salta.
El representante de la CPFS se mostró en contra de esta medida y afirmó que este “tipo de congelamientos” ya se han probado un montón de veces, y lo único que generaron “fue desabastecimiento” y que tarde o temprano “no funcionan”. Aseguró que es una medida “totalmente desacertada” y que genera mucha más incertidumbre a todo lo que es el negocio de las farmacias.
“Nosotros ya venimos pasando un muy mal momento porque acá lo que hay que hacer es bajar todas las variables. Es como que a alguien que cobra un sueldo se lo congelen pero por otro lado el alquiler, el colegio, la luz, comida sigan subiendo. Eso es lo que les pasa a las farmacias. A mi me congelan lo que vendo pero por otro lado todo lo demás sigue subiendo se no hace inviable, más con el margen de ganancia que tenemos las farmacias”, expresó.
El referente del sector resaltó que las farmacias no son “formadores de precio”, sino que ya vienen incluidos desde los laboratorios y la Secretaría de Comercio. Además, afirmó que le quedan una utilidad neta del 2 por ciento del precio del medicamento. “Imagínense que con esos números no es muy agradable la medida. Esto ya se probó, es una receta vieja fracasada”, agregó.
Francisco Puló criticó la medida y afirmó que los controles de precio nunca funcionaron y explicó que va a empezar nuevamente el desabastecimiento. Explicó que esa medida va a afectar doblemente a Salta porque en de la provincia se fue la segunda droguería más grande del país hace dos meses, dejando a 60 empleados en la calle y produciendo un problema de abastecimiento. “Habrá que ver de donde conseguimos medicamentos, agregó.
Obras sociales
El margen promedio de ganancia bruto de un medicamento está en el 30%. Pero las farmacias, para atender con obra social le tienen que dar un 15% de su rentabilidad y además les tienen que pagar Ingresos Brutos. Puló detalló que alrededor de un 18 o 20% de descuentos y les queda un 10% para hacerse cargo de todos los gastos
“Es una locura. Con eso no pagamos ni los alquileres o los sueldos. Por eso, que hay muchísimas farmacias que en toda la provincia que no pueden atender hoy a la seguridad social. El único poder de fuego que podríamos tener las farmacias es no atender más a las obras sociales, que la gente venga, compre y vaya a pedir reintegro. Porque las obras sociales nos sacan cada vez más y nos alargan los plazos de pago”, destacó.
La idea que tiene el Gobierno nacional, es que a partir de enero, cuando se cumplan los dos meses del acuerdo, conformar un vademécum de alrededor de 500 productos que estén regulados.
“A ese tema habría que verlo. Ya se hizo una vez un stock de 500 medicamentos de alta rotación y lograron un acuerdo con la industria. Porque no facturan con genéricos y que en vez de poner el nombre comercial pongan el nombre del medicamento así el paciente pueda decidir que es lo que toma porque hay remedios que cuestan el doble. Entonces, también vamos a tener que mirar un poquito eso”, comentó.
Todos los empresarios que integran la Cámara están con la misma molestia porque ya sea farmacia chica o grande tienen los mismo problemas. Hay mucha molestia en el sector porque esta situación que les genera mucha imprebisibilidad en sus negocios. “Además, nos vemos atentados por todo lo que es la venta online donde nadie la controla y nadie sabe de donde salen los medicamentos. Es un mercado que es tierra de nadie”, finalizó Francisco Puló.