Una joven de La Plata denunció a través de sus redes sociales una angustiante situación con la que se topó cuando había salido a divertirse con amigas. Fue discriminada en un bar por utilizar silla de ruedas. “Me quedé en shock, nunca me pasó algo así”, expresó.
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Una joven de La Plata denunció a través de sus redes sociales una angustiante situación con la que se topó cuando había salido a divertirse con amigas. Fue discriminada en un bar por utilizar silla de ruedas. “Me quedé en shock, nunca me pasó algo así”, expresó.
Sucedió el sábado por la noche. El lugar admitió lo sucedido y aseguró que aquel “no es el pensamiento de la empresa”. La chica confirmó a Todo Noticias que formalizó la denuncia ante el Instituto Nacional contra la Discriminación, la Xenofobia y el Racismo (INADI).
Martina Sierra, de 22 años, realizó un descargo horas después de que le negaran el ingreso a un bar de la ciudad. “Hola! Les quiero contar una situación que me pasó y me dejó bastante mal. El sábado 18/12 quise ir a Bye Henry con unas amigas para festejar el cumpleaños de una de ellas. Cuando llegué pedí una mesa para cinco y la chica de la entrada me dijo que no había lugar”, inició en un texto que publicó en historias de Instagram.
“Le pregunté si había para cuatro y me dijo que tampoco”, remarcó. La joven explicó que al llegar una amiga suya volvieron a preguntar si había espacio disponible y entonces le respondieron que había una mesa en el fondo y que su silla “no pasaba por el lugar”, pero ellas decidieron entrar para chequearlo.
Según su relato, una vez que el grupo confirmó que la silla de Martina sí pasaba por la entrada y había suficiente espacio entre las mesas, la empleada de la recepción del bar le respondió que no podía pedirle a la gente que arrimara las sillas a sus mesas porque su jefe lo consideraba “de mala educación”.
A la situación angustiante, se sumó el comentario de otro de los trabajadores del lugar. “En el bar después se arma boliche y va a ser un quilombo con la silla”, dijo.
Tras detallar lo sucedido, Martina contó que era la primera vez que le sucedía algo del estilo. “Me quede en shock, porque los que me conocen saben que salgo bastante y nunca me pasó algo así. No puedo entender como es que siguen existiendo estas situaciones de discriminación casi terminando el 2021”, manifestó en el descargo que compartió.
“Ya es bastante insoportable cada vez que quiero salir tener que andar preguntando si el lugar está adaptado para que, encima una persona X decida si podés entrar o no”, sostuvo.
“Somos muy abiertos para los temas populares y para otros muy ignorantes. Con esto solo quiero que se sepa cómo es la realidad para algunos, que por más que le pongamos toda la onda para hacer una vida ‘normal’ existe ‘gente’ (si se la puede llamar así) que te arruina el día”, añadió la joven. “La persona no es la discapacitada, la sociedad es la discapacitada”, cerró.
La historia recibió innumerables reacciones y fue compartida por una gran cantidad de usuarios. “Ni loca me esperaba la repercusión que tuvo, pero lo terminó compartiendo todo el mundo. Estoy muy agradecida”, expresó en diálogo con este medio.
“En el momento no les dije nada porque me quede shockeada. Después, el mismo sábado lo charlé con mi mamá, le dije que quería hacer la denuncia formal. No sabía bien cómo avanzar, pero mi entorno me insistió para que hiciera el descargo en redes primero”, explicó Martina, que estudia Abogacía. “Con la repercusión se contactó una persona del INADI, y junto con gente conocida me asesoré y ayer (martes) envié el formulario con la documentación para presentar en el organismo”, .
“Desde el bar ofrecieron una disculpa que fue más pública que otra cosa. Tampoco se comunicaron con privado”, indicó.
Bye Henry respondió ante la viralización del mensaje de Martina, con la denuncia, también con un texto difundido en sus redes. Pidieron disculpas a “una persona que se sintió maltratada y discriminada” por los empleados que trabajaron el fin de semana.
“De ninguna manera ese es el pensamiento de la empresa, que al construir el local lo hizo con rampa y baño para discapacitados”, indicaron.
“Estamos muy tristes por la situación, tendríamos que haber movido cielo y tierra para que se sienta cómoda, haremos lo necesario para que no se vuelva a repetir. Entendemos el enojo justificado pero ojalá nos puedan dar otra oportunidad, fallamos, nos equivocamos, mil disculpas otra vez”, escribieron en la cuenta.