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El pesebre navideño, cuál es su significado y cómo armarlo

Para la tradición cristiana simboliza el nacimiento de Jesús y se lo arma el 8.
Miércoles, 08 de diciembre de 2021 00:00

El pesebre de Navidad es uno de los símbolos tradicional de la festividad. Muestra en un simple altar prácticamente toda la historia del milagro de la celebración y funciona como una forma de recordar por qué se festeja esta fiesta. En la tradición cristiana, representa el nacimiento de Jesucristo. Según la costumbre, se suele armar el 8 de diciembre -el Día de la Inmaculada Concepción- junto con el árbol navideño y se procede a desarmarlo luego del 6 de enero, pasado el Día de los Reyes Magos. Saber el sentido de un pesebre ayuda al momento de armarlo.

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El pesebre de Navidad es uno de los símbolos tradicional de la festividad. Muestra en un simple altar prácticamente toda la historia del milagro de la celebración y funciona como una forma de recordar por qué se festeja esta fiesta. En la tradición cristiana, representa el nacimiento de Jesucristo. Según la costumbre, se suele armar el 8 de diciembre -el Día de la Inmaculada Concepción- junto con el árbol navideño y se procede a desarmarlo luego del 6 de enero, pasado el Día de los Reyes Magos. Saber el sentido de un pesebre ayuda al momento de armarlo.

Algunos tips

Hay una serie de tips que se deben seguir a la hora de armar un pesebre. ¿Dónde? Debe ser visible pero no ocupar un espacio donde moleste. Lo ideal es alguna esquina de una habitación concurrida, como puede ser el living.

El tamaño. Es importante tener en cuenta a la hora de armar el pesebre de Navidad que los tamaños deben ser proporcionales, con los personajes principales ocupando su lugar protagónico, pero sin parecer gigantes en comparación con el resto de los elementos.

La superficie. Una vez que se sabe el lugar donde estará y cuánto espacio ocupará, es hora de elegir de qué estará hecha la superficie. Las recomendaciones tradicionales sugieren arena, ya que representa la región desértica donde queda la ciudad de Belén.

El verde siempre suma. Algunos elementos naturales, como piñas, plantas pequeñas o pasto, suman para darle vida al pesebre, mientras que la escenografía consigue un tono un poco más natural gracias a la inclusión de estas.

El establo. Uno de los puntos principales es el hacer correctamente el lugar donde nació Jesús. Para eso la mejor recomendación es armarlo a mano, ir por un estilo simple o reciclar las versiones anteriores, con el objetivo de tener algo más original.

Las figuras. Los personajes principales de la escena son claramente de las partes más importantes, por lo que se debe respetar la tradición a la hora de ponerlos. Cabe recordar que siempre está el niño Jesús en el medio, José y María a los costados y los Reyes Magos, mirando a lo lejos.

Las luces. Una luz principal debe representar a la Estrella de Belén, mientras que se pueden utilizar luces más pequeñas para el resto de la iluminación. Un objeto útil son las luces led mientras que las velas o cualquier cosa con fuego está totalmente desaconsejado, principalmente por el peligro de incendio.

 

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