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“Las casitas de aves nos enseñan a disfrutar y no atrapar la naturaleza”

Daniel Rodríguez y Natalia Rovere las hacen y cuentan en una entrevista por qué no se tratan de una pieza decorativa, sino que se inscriben en una filosofía de vida.
Martes, 16 de marzo de 2021 19:17

El periodista, fotógrafo, documentalista y pintor naturalista Elio Daniel Rodríguez hace cinco años creó la página web Noroeste Salvaje, en la que registra sus inmersiones en la naturaleza de una manera grata para el lector -que casi es transportado a la experiencia de un fuego crepitante de campamento azuzando los relatos-, pero con la rigurosidad bibliográfica de quien sustenta su labor con investigación y contacto con especialistas. Luego, en 2019, presentó junto al desarrollador de juegos suizo Bernhard Kläui “El juego de las aves de Argentina”, que alía la diversión que puede ofrecer una tarde de concentración en dinámicas con familiares y amigos con la adquisición de cultura sobre la vida salvaje del país. Después llegaron los rompezabezas con cuadros y fotos que retratan la vida silvestre. Ahora, como un sobrevenir deseado, da a conocer las casitas para aves, que prepara con su esposa Natalia Rovere, y que distan mucho de ser un elemento decorativo.

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El periodista, fotógrafo, documentalista y pintor naturalista Elio Daniel Rodríguez hace cinco años creó la página web Noroeste Salvaje, en la que registra sus inmersiones en la naturaleza de una manera grata para el lector -que casi es transportado a la experiencia de un fuego crepitante de campamento azuzando los relatos-, pero con la rigurosidad bibliográfica de quien sustenta su labor con investigación y contacto con especialistas. Luego, en 2019, presentó junto al desarrollador de juegos suizo Bernhard Kläui “El juego de las aves de Argentina”, que alía la diversión que puede ofrecer una tarde de concentración en dinámicas con familiares y amigos con la adquisición de cultura sobre la vida salvaje del país. Después llegaron los rompezabezas con cuadros y fotos que retratan la vida silvestre. Ahora, como un sobrevenir deseado, da a conocer las casitas para aves, que prepara con su esposa Natalia Rovere, y que distan mucho de ser un elemento decorativo.

La casita de pájaros ¿qué objetivo tiene y cómo se inscribe en una filosofía de respeto animal? 

Las cajas nido, también llamadas cajas anideras o simplemente casitas de aves, permiten a los enamorados de la naturaleza en general y de las aves en particular disfrutar de ellas en libertad y, al mismo tiempo, ayudarlas. En la sociedad actual son una manifestación de un cambio de paradigma, pasando desde aquel que nos hacía a los seres humanos encerrar a las aves en jaulas de reducidas dimensiones para disfrutar de sus bellos cantos o colores a esta nueva forma de disfrute basada fundamentalmente en el respeto hacia la naturaleza y sus criaturas, y con deseos de ayudarlas. 

Colocar una casita de aves en nuestro jardín es una invitación a las aves para que lo visiten y hagan de él su hogar, al menos durante los meses que implique la construcción del nido en el interior de la caja nido, la puesta de los huevos y la crianza de los pichones. Y hay una diferencia muy grande entre invitar a alguien a nuestra casa y obligarlo a estar encerrado en una jaula. 

Desde ese punto de vista, una casita de aves, analizada desde un lugar cercano a lo filosófico, constituye algo así como una metáfora que nos enseña que no somos dueños de otras vidas más que de la nuestra y que nos mueve al desapego para con aquello que nos gusta y que quisiéramos tal vez conservar, pero que finalmente logramos entender que no nos pertenece, porque pertenece a la vida y a la libertad, que es el bien más preciado de cualquier ser vivo. 

Otra cosa que nos enseña una casita de aves es que no podemos manejar todo y que debemos aprender a controlar nuestra ansiedad. Que la naturaleza tiene sus tiempos. Y algo muy importante: ¡que debemos saber esperar! Puede llevar a veces un par de años hasta que una pareja de alguna especie de ave nidifique en nuestra casita, como también puede hacerlo al poco tiempo de instalada; pero en todos los casos, no es algo que nosotros podamos manejar a nuestro antojo. 

¿Qué características debe tener el jardín y la zona donde se la colocará?

Puedes colocar tu casita en jardines, explotaciones forestales o áreas afectadas por incendios, porque sucede que una limitación importante para que algunas aves construyan su nido en ciertas zonas es la falta de sitios adecuados para hacerlo. 

En las zonas más afectadas por el impacto de las personas, como por ejemplo en parques y jardines, faltan huecos para anidar y en las mismas construcciones humanas también, ya que cada día se hacen edificaciones más “perfectas” y sin intersticios que puedan aprovechar las aves para criar a su descendencia. 

En las explotaciones forestales los árboles son muy jóvenes y muchos árboles viejos y con huecos han sido eliminados. También puedes colocar tu casita de aves en zonas que han sufrido incendios y cuya vegetación se está recuperando, ya que allí, seguramente, pueden haber sucumbido muchos árboles añejos y apropiados para que las aves se reproduzcan.
En todos los casos, la casita de aves se deberá colocar donde el paso de las personas no sea demasiado importante, en un sitio algo tranquilo y alto, a unos tres metros del suelo. Si la ponemos en nuestro jardín deberemos tener en cuenta que mientras menos perturbado permanezca el lugar donde la coloquemos más rápidamente tomarán confianza las aves para hacer allí su nido. Esto no quiere decir que no la podamos colocar en un jardín algo chico donde suelen estar las personas; pero, incluso en un jardín así, es mejor si lo hacemos en un sitio donde haya el menor tránsito de personas posible. 


¿Qué especies de aves pueden sentirse atraídas por las casitas en esta zona y cuál es el uso que les darán? 
Es importante comprender que no todas las especies nidifican en huecos, con lo cual el universo de potenciales inquilinos que pueda tener nuestra casita está acotado a las aves silvestres que viven en nuestra región y que usualmente utilizan oquedades, intersticios o zonas protegidas para construir sus nidos. 
Las casitas de aves nuestras tienen un tamaño estándar y con un orificio de entrada también adaptado a la generalidad de las aves paseriformes (pájaros) que pueden nidificar en este tipo de estructuras. Por ahora, no contamos con cajas nido para otro tipo de aves, como lechuzas o rapaces. Pero en un futuro cercano comenzaremos a producirlas. 
En el Noroeste argentino puede suceder fácilmente que una casita de aves de las que fabricamos sirva de lugar de nidificación para aves como la charrasca o ratona común (Troglodytes aedon), el jilguero (Sicalis flaveola), el tordo músico (Agelaioides badius) o los gorriones (Passer domesticus). Cabe destacar que hay especies que simplemente se guarecen en estas casas de aves, como la ratona común, cuyo macho puede usar nuestra casita de “dormitorio”, incluso durante la época de reproducción, mientras la hembra permanece en el nido, en otro lugar, incubando los huevos o criando los pichones. 

¿Cuáles son los consejos para mantener y que siempre esté lista la casita de aves?
Al instalar la casita de aves hay que asegurarse de que quede firmemente sujetada, ya que, si no lo está, es posible que caiga al suelo una vez que las aves pusieron los huevos o ya tienen los pichones, lo que haría fracasar la puesta y acabaría con la vida de las crías. 
No hay que intentar acercarse a observar el interior de la casita de aves cuando las aves están nidificando; entonces, se debe observarlas de lejos. Una vez al año, cuando ha concluido la temporada de reproducción y antes de que comiencen los fríos del invierno, aproximadamente en abril, se puede limpiarla y darle sobre todo exteriormente una capa de barniz. Y mejor si son dos para otorgarle una mayor durabilidad. 

En el caso de las que ustedes ofrecen ¿de qué material están hechas y por qué eligieron esos diseños? 
Comenzamos haciendo casas de diferentes materiales como madera y calabazas, pero ahora las fabricamos solo en madera de reforestación, de pino específicamente. Los diseños son responsabilidad de las hábiles manos y la sensibilidad estética de mi esposa, que las pinta, decora y barniza para que, además de que cumplan el objetivo de ayudar a las aves, puedan lucirse en nuestros jardines como si fueran obras de arte puestas al servicio de los pájaros. En ese sentido cada casa es única. Sería necesario señalar que elaboramos tres tipos de casitas de aves: unas son para adosar a una pared (por ejemplo, en una galería al exterior), otras son para colgar (por ejemplo, de la rama de algún árbol) y tenemos también unas casitas reforzadas para situar enlazadas al tronco de un árbol y con puerta rebatible. 


El que tiene casita de aves ¿puede tener animales domésticos?
Sí, por supuesto, pero si tiene gatos es mejor tener en cuenta que la altura de instalación de la casita debe ser superior a la que el gato puede alcanzar de un salto. 
 

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