El Gobierno de Bolivia creó un grupo de "contrainteligencia" en el caso del presunto narcotraficante uruguayo Sebastián Marset, quien es buscado hace más de un mes, para establecer si obtuvo ayuda o algún beneficio por parte de alguna institución del Estado para poder fugarse.
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El Gobierno de Bolivia creó un grupo de "contrainteligencia" en el caso del presunto narcotraficante uruguayo Sebastián Marset, quien es buscado hace más de un mes, para establecer si obtuvo ayuda o algún beneficio por parte de alguna institución del Estado para poder fugarse.
El ministro de Gobierno (Interior), Eduardo del Castillo, dijo ayer que "no se puede descartar que haya existido algún favorecimiento", dado que se han presentado varias "trabas" en la investigación.
El grupo de "contrainteligencia", conformado por policías y civiles, investigará a todos los que han participado en operativos relacionados con el caso. Marset, acusado de liderar una red criminal internacional de tráfico de drogas, ha difundido dos videos. En uno de ellos agradeció al director de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico por alertarle de su captura y en el otro dijo que si habla, "la política de Bolivia se va a la mierda".