El chofer de una unidad de transporte urbano perteneciente a la empresa 13 de Junio, que presta servicio en la ciudad de Tartagal, plantó bandera y se negó a sacar la unidad que le tocaba conducir para que preste el servicio en los diferentes barrios y el centro de Tartagal, dada la pésima condición de la unidad, explicó. "Sacar ese ómnibus a la calle es un peligro para el chofer, para los pasajeros y para cualquiera que se nos cruce en la calle. Yo no pienso conducirlo", expresó, y le explicó al personal policial que se acercó al lugar las condiciones deplorables en la que la unidad presta habitualmente el servicio, ya que es sacada todos los días a las calles de Tartagal.
Lo más extraño de todo es que la Dirección de Tránsito, que se supone debe controlar las condiciones de las unidades de la empresa que concentra el 90 por ciento del servicio urbano, no se hayan dado cuenta de esto que denunció públicamente el trabajador, cuando esas vetustas unidades circulan por las calles de Tartagal desde hace años.
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Sin explicación
Hasta el momento nadie explicó por qué se permite que unidades de esta empresa, que el año pasado logró que Tartagal tenga el boleto más caro de la República Argentina, presten el servicio, con el riesgo que esto implica.
El hecho se produjo el fin de semana, cuando el mencionado chofer le explicó a los periodistas que llegaron a la base de trabajo de la empresa 13 de Junio que otro chofer "sacó el interno N° 36 para hacer el recorrido. Esa unidad no está en condiciones de ser sacada a la calle. No tiene burletes, tiene el motor en la parte de adelante y emana un calor impresionante, que es muy perjudicial para el chofer, ya que se trabaja en días de intenso calor donde la temperatura llega a los 50 grados. Dentro del ómnibus es insoportable, pero igual nos exigen sacarlo a prestar servicio", explicó mientas mostraba los deterioros.
Según lo relatado por el trabajador, todo sería cuestión de ahorro, ya que la empresa cuenta con unidades más nuevas y en condiciones. "Hay otras unidades que están en buenas condiciones para prestar el servicio, pero no la quieren sacar porque gasta más gasoil".
El trabajador señaló además otra unidad de la misma empresa: "Este coche no tiene balizas, no cuenta con luces de giro, pero los dueños llaman a los compañeros para que los saquen en estas condiciones porque yo me niego y no es por un capricho. El tablero no tiene luces, el asiento del chofer no tiene cinturón de seguridad, y al no tener luces de giro si quiero doblar y se mete una moto y provoco un accidente, el culpable voy a ser yo", explicó mientras mostraba la deplorable condición de la unidad en la que los tartagalenses se ven obligados a viajar.
Combustible
El trabajador agregó que "lo más lamentable es que la empresa tiene otras unidades que están en buenas condiciones para prestar el servicio, pero no la quieren sacar porque gasta más gasoil que estas otras que se caen a pedazos".
En definitiva fue este trabajador quien, arriesgándose a perder su empleo, llamó a los medios locales y solicitó la presencia de personal policial para denunciar la pésima condición en que trabajan estas unidades, con el riesgo que conlleva para los pasajeros, pero también para cualquier peatón, automovilista o motociclista que se cruce con alguna de estas unidades, que siguen circulando por la ciudad.
"El servicio que presta esta empresa es pésimo y los usuarios lo saben mejor que nadie. En estos meses viajar con ese motor, arrojando tanto calor, es inhumano. Un equipo de aire acondicionado no es un lujo, pero como nos obligan a salir en esas unidades tenemos que obedecer, y eso no puede seguir sucediendo", consideró al poner en conocimiento tanto del personal policial como de los periodistas locales la realidad de este servicio que diariamente usan miles de tartagalenses.