inicia sesión o regístrate.
Vecinos del barrio Obrero, perteneciente a la ciudad de General Güemes, realizaron una reunión en la plaza Juan Carlos Dávalos, donde se plantearon los problemas generados por el proyecto de instalación de nuevas cañerías para el agua, que fue abandonado sin terminar, por parte de la empresa Norte Áridos contratada por Provincia.
Baldosas flojas, caños sobresaliendo de las veredas o zanjas sin cerrar, son algunos de los peligros que deben sortear las personas que caminan por las veredas, para evitar sufrir algún accidente, "dedos lastimados, rodillas con moretones, tobillos lesionados son el resultado de accidentes que varias personas sufrieron, debido a esta obra mal realizada" comentó José Magueri, una víctima de esos accidentes.
El recambio de cañerías en todo el barrio Obrero, un barrio céntrico de la ciudad, se planificó para dar solución a los problemas de falta de presión de agua, que los vecinos venían padeciendo desde hace décadas, sin que nunca se haya podido encontrar el origen del problema. Se consideró como una mejor opción, que la tirada de las nuevas cañerías se hicieran sobre las veredas, dejando los viejos caños enterrados en las calles, manteniendo su uso mientras duren los trabajos. Desde el inicio de la obra, fueron múltiples los inconvenientes ocasionados a los vecinos, además de la inevitable apertura de las veredas, se sumaron roturas de cañerías de gas, rotura de la vieja cañería de agua, y la excesiva demora en los trabajos, permaneciendo las veredas rotas por demasiado tiempo.
"La traza de estas cañerías será por las veredas, porque el sector está pavimentado, una vez finalizada la instalación, las veredas deberán quedar en su estado original, las conexiones domiciliarias también serán reemplazadas, el plazo de ejecución es de 120 días corridos. Le pedimos a los vecinos que tengan paciencia porque seguramente por la rotura de las veredas van a tener algunos inconvenientes, pero deben tener en cuenta que es por un bien mayor" fue el compromiso asumido, el día se dio a conocer la puesta en marcha del proyecto, por parte de Ángel Torres de Aguas del Norte, acompañado por el entonces intendente Sergio Salvatierra, en octubre del 2021. Se consideraba a esta inversión de 60 millones de pesos, como una solución definitiva al problema generado por el mal estado de cañerías con más de 70 años de uso.
"No sabemos si la instalación de todas las cañerías ya fue completada, tampoco si serán utilizadas alguna vez, nos preocupa que las veredas quedaron intransitables. Desde hace al menos un año que no hay movimientos, si yo debo arreglar mi vereda debe invertir $140.000, y no me corresponde, ya ocurrieron muchos accidentes menores, pero alguna persona puede sufrir una lesión grave, estoy juntando firmas de vecinos para hacer una nueva presentación" manifestó Eduardo Echeñique.