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El ex vicepresidente del Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI) Jorge Schneebeli exteriorizó hoy su profunda preocupación por la reciente decisión del Gobierno de modificar esa entidad en una unidad organizativa dependiente de la Secretaría de Industria.
“El clima es de angustia e incertidumbre. Nadie sabe cómo va a seguir. Y eso es lo más grave. Esto es más violento que los '90. No hay interlocutores, no hay margen para discutir. No quieren mejorar. Quieren arrasar”, sostuvo en declaraciones a radio Splendid AM 990.
Además, el ex funcionario señaló que "la transformación del INTI no responde a un objetivo técnico ni de eficiencia, sino a un modelo ideológico. No quieren que haya controles”, afirmó.
Y añadió: “Algunos sectores tienen serias sospechas de que esta desestructuración puede facilitar negocios. En otros casos, ni siquiera le encontramos lógica”.
“El INTI es una caja de herramientas para el ámbito industrial. Asiste a la industria, capacita, certifica, asesora. Es federal, con presencia en cada provincia según las necesidades industriales locales”, explicó.
Fundado en 1957, el INTI cumple además la función de Instituto Nacional de Metrología, lo que implica que todo lo que se mide en el país -ya sea en el ámbito científico, industrial o legal- debe validarse a través de sus laboratorios.
“Somos los custodios de los patrones nacionales”, afirmó Schneebeli y agregó: “El INTI está presente en todo lo que hacemos: cargar nafta, comer una hamburguesa, usar un equipo médico... aunque no se vea, estamos detrás de cada control de calidad”.
El especialista denunció que en los últimos 18 meses el organismo perdió 700 trabajadores, lo que representa el 25 por ciento del total: “Se van por sueldos congelados, por falta de carrera, por retiros voluntarios. Y eso no solo implica perder capacidad operativa, sino también experiencia, formación, transferencia de conocimiento”.
Por último, remarcó: “En los '90 lo viví como joven estudiante. Hoy lo vivo desde otro lugar, y veo en los jóvenes esa misma angustia: no saber qué va a pasar”.