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La fundación Anawin (“Hombre pobre que solo tiene a Dios”) está dedicada a brindar apoyo escolar con derivación docente, y en enero de 2013 cumplirá dos años en el amplio y moderno complejo edilicio ubicado en el kilómetro 2 de la avenida Solís Pizzarro. La directora es Viviana Ricchiardi, a quien secunda Natalia Bongiovanni.
Atiende a 57 niños y adolescentes (de 6 a 14 años) procedentes de escuelas de la zona oeste de Salta, en situación de riesgo social, familiar, cultural y pedagógico.
La atención
Los chicos reciben refuerzo nutricional y atención primaria de la salud; pueden optar entre talleres de fotografía y video, música y canto, teatro y pintura y escultura.
Los más grandes tienen la oportunidad de aprender oficios como salida laboral, tales como peluquería, dibujo y pintura, manualidades, artesanías y tejidos.
Además del apoyo escolar, tienen clases de computación y acciones recreativas y deportivas (fútbol, rugby, vóley, béisbol, hockey, yoga, danzas …rabes, gimnasia rítmica, taekwondo, y scout Argentina. Tienen biblioteca y salón de usos múltiples.
Equipo docente
Las clases están a cargo de cinco docentes y numerosos voluntarios.
Las directivas de la Fundación destacaron el aporta fundamental del voluntariado, pero aclararon que siempre se necesitan más personas dispuestas a ofrecer su contribución para el mantenimiento de la obra.
“Necesitamos muchas manos y muchos corazones generosos que quieran apoyar estos proyectos y los futuros, para que educar en la esperanza sea posible”, coincidieron Viviana y Natalia.