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El 8N fue masivo

Viernes, 09 de noviembre de 2012 02:36
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Con múltiples consignas y de manera pacífica, cientos de miles de personas coparon anoche las calles de los principales centros urbanos del país en el segundo cacerolazo contra el Gobierno que se hizo en menos de dos meses. La masividad de la protesta fue un claro mensaje para la Casa Rosada.

En comparación con el 13S, la movilización de ayer ganó en cantidad y calidad. En manifestantes, el cacerolazo de superó ampliamente el de septiembre pasado. Por otra parte, el carácter de la protesta también mejoró considerablemente. Es que los reclamos y las consignas fueron expresadas en un marco de respeto y los excesos y agravios quedaron aislados.

Pese a que el Gobierno nacional intentó polarizar al extremo con el cacerolazo, tildando de “destituyente”, “golpista” o “ultraderecha” a la movilización, su composición fue sumamente heterogénea.

En Buenos Aires participaron gente de distintas edades y diversas extracciones sociales, sobre todo de clase media y media alta. Asimismo también contó con la presencia de familiares de las víctimas de la tragedia ferroviaria de Once y organizaciones de jubilados que centraron su reclamo en el 82% móvil.

Una sola bandera

En Plaza de Mayo y en varios puntos céntricos de Capital Federal predominaron las banderas de Argentina y fue notable la ausencia de identificaciones partidarias.

Entre los carteles hechos a mano, en computadora o telas pintadas con aerosol, predominaron las críticas contra una eventual re-reelección de la Presidenta, contra los polémicos índices del Indec en cuanto a la inflación, contra la inseguridad callejera y un pedido especial por una Justicia independiente entre otras tantas.

La movilización terminó pacíficamente pasadas las 22 horas y con las calles ganadas por miles de personas que no se identifican con el Gobierno. El silencio se apoderó de funcionarios y dirigentes oficialistas, aunque con la excepción del dirigente social kirchnerista, Luis D'Elia, quien desestimó la protesta aduciendo el “fracaso de la oposición”.

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