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Ha comenzado a faltar el gas por las condiciones climáticas. El frío exigió a las distribuidoras comenzar con la restricción en Buenos Aires, La Pampa y Santa Fe, y así es que 200 industrias están afectadas. El racionamiento es la medida tomada por el comité de emergencia conformado con los técnicos del Gobierno, el Ente Nacional Regulador del Gas (Enargas) y concesionarias del sector. Aunque involucró a muchos grandes usuarios, la medida tiene todavía un alcance parcial. Las industrias son clientes que reciben todas las compañías con servicio interrumpible, o sea, que pagan una tarifa reducida. Además, en el contrato de provisión pactan que cuando escasea el fluido, están obligadas a utilizar solo la capacidad de reserva diaria. En el área de Metrogas hay 80 clientes damnificados total o parcialmente.
Solo para un tipo de servicio
En la de Camuzzi, concesionaria del sur de la provincia de Buenos Aires y de La Pampa, notificaron de la medida pero solo para los servicios interrumpibles. Solo Gas Natural Fenosa, proveedora de la Capital Federal y el conurbano bonaerense, dijo no haber tenido que aplicar medidas de este tipo. El gas también falta en Santa Fe, con 60 empresas damnificadas. En el contexto de esta medida se privilegiará el servicio en los hogares y que los usuarios domiciliarios para que no tengan inconvenientes. En los últimos días los cortes aumentaron. Históricamente los cortes se producían por falta de la capacidad de transporte en los gasoductos y en momentos en que subía la demanda de gas en los hogares. Se aplicaban, entonces, solo durante un lapso de entre 5 y 30 días en los inviernos.
Ahora es una cuestión distinta: es la falta de inyección desde los yacimientos, una situación derivada de la escasa inversión en hidrocarburos. El año pasado, en junio, los damnificados fueron 300 grandes usuarios industriales. En ese momento de los cortes, los consumos residenciales siguieron altos (unos 90 millones de metros cúbicos por día). Desde 2003 la producción nacional de gas no ha parado de descender, al tiempo que subía la demanda. Con el sostenido crecimiento del consumo domiciliario de gas, muchos empezaron a mirar con más frecuencia la estabilidad del sistema.