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Una invasión de palomas urbanas tiene a mal traer a los vecinos de la ciudad de Rosario de Lerma. Los lugareños temen que las aves puedan acarrear enfermedades. También manifestaron que estos animalitos con sus excrementos y plumas obstruyen las canaletas de desagüe.
En el barrio Parque Palermo, ubicado en el sector norte, los vecinos aseguran que estas palomas poseen el hongo transmisor de la meningitis y de varios ectoparásitos, como por ejemplo el chinche del nido o la garrapata, entre otros.
“No sabemos qué hacer con estas aves. Son muy dañinas, además de ser portadoras de enfermedades. Todo el año tenemos que estar luchando para que no estropeen las ductos de los desages de los techos”, contó María Eugenia, quien reside en un monoblock de la barriada.
Recordó que “cuando se trancan los desagües es imposible limpiarlos. El olor es insoportable y peligroso para los niños y mayores por las enfermedades que transmiten”.
La invasión de estas aves es tal, que en el campanario de la parroquia Nuestra Señora del Rosario instalaron ahuyenta palomas de acero con púas de 11 centímetros. A pesar de esta medida, siguen habitando en los rincones de la torre de la iglesia.
Opinión profesional
El médico veterinario Alejandro Hurtado manifestó que “es preocupante esta situación que puede convertirse en una plaga. Están por todos lados. Se observa una gran reproducción en las zonas rurales. En las abandonadas estufas tabacaleras de adobe encuentran el lugar perfecto para multiplicarse”.
El profesional agregó que “esto puede provocar la diseminación directa de sus enfermedades a otros animales y humanos. Debemos empezar a controlarlas de inmediato”.
Trascendió esta semana que una vecina de esta ciudad manifestó síntomas de la conocida “enfermedad del loro”. Se trata de un principio de neumonía con fiebre, dolor de cabeza y escalofríos. La mujer tenía en su casa jaulas con loros y palomas. Fue atendida en un centro de salud privado de Salta capital y está fuera de peligro.