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Un grupo de más de 15 personas atacó antenoche a las 21.30, aproximadamente, a la agente de Policía Patricia Erazu (29), quien circulaba como acompañante de su esposo, Jorge Callau (33), en una motocicleta.
En las esquinas de Borrego y Ortiz de Zárate fueron interceptados por un grupo encabezado por Gerardo Palomo (29), presidente del centro vecinal del barrio Balut, quien tomó el manubrio e hizo que la pareja cayera al suelo. Acto seguido, sus acompañantes y él mismo golpearon, insultaron y amenazaron al matrimonio, mientras una turba trataba de arrebatarle el arma reglamentaria a la uniformada.
Luego de un forcejeo los atacados lograron zafarse de los sujetos y escaparon hacia su vivienda que esta ubicada en Belgrano al 1400. Minutos después los malvivientes llegaron hasta ese domicilio, en cuyo interior se encontraban, además de Callau y Echazú, unas amigas y un niño, hijo de ambos.
Los forajidos comenzaron a apedrear la casa y luego trataron de entrar, cosa que lograron. Allí destrozaron un televisor, muebles y le quitaron el arma a la mujer policía.
Informado el 911, refuerzos policiales llegaron en cuestión de minutos: Infantería y otras unidades se hicieron presentes, pero los agresores huyeron tras lanzar una lluvia de piedras contra los uniformados.
Más tarde y con el testimonio de la policía atacada, de sus familiares y allegados, se estableció que gran parte de los atacantes eran residentes de la zona.
Con orden del juez de Instrucción Formal 1, Oscar Blanco, fue detenido el presidente del centro vecinal del barrio Balut, Gerardo Palomo. Asimismo y por datos de testigos, se libró orden de detención contra otros dos delincuente conocidos en la jerga del hampa como “El Militar” y “Chuqui”, conocidos por su extrema violencia y fama de “pesados”, aunque finalmente no fueron capturados.
La policía informó que se tienen datos precisos de sus paraderos y que en las próximas horas serían detenidos y puestos a disposición del juez Blanco, quien caratuló el hecho como “robo calificado en banda, daños y violencia”.
El matrimonio agredido fue atendido en el hospital San Vicente de Paul, donde les diagnosticaron, a ambos, excoriaciones y politraumatismos varios en distintas parte del cuerpo. No se saben, hasta ahora, las causas del desproporcionado ataque.