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Insólito. Que los chicos se vayan de las manos es cosa de todos los días, pero que los padres tomen cartas en el asunto con más violencia, es sorprendente. Es lo que pasó en la escuela Agrotécnica de la localidad de Las Lajitas, donde dos chicos se pelearon y, al día siguiente, el padre de uno de ellos fue a buscar al otro adolescente a la casa para agredirlo e hizo serias amenazas a los papás.
Hace casi un mes en un colegio de Caballito, en la provincia de Buenos Aires, se vivió una situación similar de violencia entre padres, pero que terminó a los puñetazos, como barrabravas. Lo que sucedió en el colegio de Las Lajitas no llegó a las manos porque el otro papá no estaba en la casa y la mujer de este apaciguó la rabia del enfurecido hombre.
En la Escuela Agrotécnica 3167 hace tres meses ya se habían denunciado numerosos casos de violencia escolar. Es más, un grupo de padres llegó a impedir el ingreso del director, Carlos Sosa, al establecimiento educativo por consideralo “incapaz” de resolver los conflictos. En la actualidad, Sosa está de licencia.
La pelea entre los chicos, uno de segundo y el otro de primer año ocurrió adentro de la escuela el 24 de octubre pasado, alrededor de las 13.30, según indicó a El Tribuno Ramona Colque, quien denunció que su hijo es “víctima de bullying” y es hostigado de forma constante.
Los alumnos fueron suspendidos, uno con cinco días y otro con tres. “El padre del otro chico fue a la casa y pateó la puerta. Quería voltearla. Gritaba para que salga mi marido, después yo salí a atenderlo y quedó ahí. Se fue”, contó Ramona.
La familia intentó radicar una exposición policial, pero en la comisaría de Las Lajitas les pusieron trabas y les aconsejaron que desistieran del problema.
Para peor, al día siguiente del altercado, el hijo de Ramona fue interceptado a la salida de un club deportivo y patoteado por varios chicos, al parecer, amigos del que se peleó.
“A mi hijo, este chico lo molesta desde que comenzaron las clases. Hablamos con los que quedaron a cargo de la dirección pero dicen que se fijen los padres. Se tiran la pelota entre directivos y profesores y no dan soluciones”, dijo la mujer.
Agregó que en la Agrotécnica de Las Lajitas: “Todos hacen lo que quieren. Hay chicos tomando y fumando afuera de la institución sin que nadie les diga nada de nada”.
Para el hijo de Ramona ya es la segunda sanción en la escuela. Dice que la otra vez también fue por una pelea pero “más tranquila”.
Antecedentes
En los primeros días de julio pasado, un grupo de padres de alumnos de la Agrotécnica 3167 directamente le impidió el ingreso al establecimiento educativo al director Carlos Sosa, a quien tildaron de “inoperante”. Aseguran que “no supo ni sabe resolver situaciones de violencia escolar que casi a diario se presentan en la institución”. Sosa, por sugerencia de los supervisores presentes, tuvo que retirarse en ese momento.
En la misma movilización, los padres autoconvocados también reclamaron por la falta de preceptores, docentes y personal de limpieza. Atribuyeron las múltiples falencias a una falta de gestión departe de Sosa, y pedían su destitución. En ese entonces, Nery Arena, una mamá, contó que “planteamos al director los problemas de desorden y agresiones varias veces, pero no obtuvimos respuesta”.
Entonces, Carlos Sosa se había defendido: “Se trata de un grupo reducido de personas que integran cuatro familias y que están faltando a la verdad. Soy víctima de persecución”, había dicho a El Tribuno.