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Injusta distribución de la riqueza argentina

Martes, 12 de febrero de 2013 22:08
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“Apenas el 5% de los empleados argentinos gana entre $10.00 y $22.000 mensuales. El 70% gana $3.500”.

“Salta está muy por debajo de la media del país, con la injusticia que significa la falta de apoyo para instalar industrias ”.

Es una obviedad decirlo, pero vale la pena recalcarlo: no solo la población del país está pésimamente distribuida, sino que la riqueza también. Claro ejemplo es la provincia de Buenos Aires, que suma 15 millones de habitantes, incluido el cordón del Gran Buenos Aires y la Capital Federal, y que según el último censo concentra el 60% de la riqueza argentina.

Esa enorme desigualdad, a pesar del constante aumento de lo aportado por el campo, tendrá muy pocas variaciones, porque el gran puerto de Buenos Aires sigue siendo la meca de la mayoría de los habitantes de regiones distantes del país, que los atrae como un imán para trabajar allí, incluso a quienes saben de antemano que les espera vivir en una villa miseria.

Hace más de siete décadas que el escritor santafesino Ezequiel Martínez Estrada escribiera: “La cabeza de Goliat”, haciendo referencia a nuestro país con una cabeza grande y un cuerpo esquelético. Pero el semiolvidado analista nunca fue atendido en su prédica. Es más, desde que difundió su ensayo nuestra nación concentró más pobladores en la ciudad y el Gran Buenos Aires.

Mucho para pocos

Apenas el 5% de los empleados argentinos gana entre $10.000 y $22.000 mensuales. El 70%, llamada clase media, gana en promedio $3.500. Y la clase baja, el 25% restante, una cifra menor a los $1.000.

Los más ricos del país ganan catorce veces más que el promedio general. Una diferencia todavía abismal, pese a que se redujo desde el 2003 hasta la fecha. Ya que antes, los más poderosos, ganaban 38 veces más.

Argentina sigue siendo, a nivel regional, el de mejor distribución de la riqueza. ¿Cómo se mide esto? Con el índice Gini, un coeficiente de desigualdad entre las naciones. Nuestro país mejoró mucho en la última década en este sentido, ya que ahora está catalogada con el 0,37. Brasil es el de peor reparto dentro del Mercosur, con el 0,54. Estas cifras surgen mediante un cálculo que califica de 0 a 4 puntos. El país que más cercano está de lo ideal, es decir el cero, es Dinamarca, con el 0,24.

México fue puntuado con el 0,47 y Estados Unidos, aunque parezca increíble, tiene peor distribución de la riqueza que nuestro país, con un 0,43.

¿Por qué mejoró Argentina?

Cuando Néstor Kirchner asumió la presidencia, Argentina había alcanzado la mayor desigualdad en toda su historia. Desde allí, la economía conducida por Roberto Lavagna fue mejorando sustancialmente, por ejemplo, con la reducción de la deuda externa, en forma significativa.

Además, se pusieron en práctica varios planes sociales inexistentes, como la asignación universal por hijo, y también se continuó con los planes trabajar, introducidos por el expresidente Eduardo Duhalde. También hubo una reducción de los empleos precarios, vulgarmente llamados “en negro”.

Tomando otros parámetros, la mejor distribución de la riqueza argentina en la historia fue durante la segunda presidencia de Juan Domingo Perón. Concretamente en 1951, el 45% del producto bruto interno (PBI) argentino se destinaba al pago de salarios. Durante la presidencia de Alfonsín, esa cifra era del 30%.

Salta, el 1,5 por ciento

Nuestra provincia es la sexta del país por su superficie, y la octava por su población. A pesar de ello, apenas aporta el 1,5% al PBI nacional. Fundamentalmente por el petróleo, gas, tabaco, azúcar y turismo. Como es conocido, el aporte del valor agregado, es decir de la producción industrial, es muy bajo. El sector terciario, servicios y turismo, representa el 66% del total.

Salta está muy por debajo de la media del país, con la injusticia que significa la falta de apoyo nacional para instalar industrias y al bajísimo porcentaje que el Estado nacional paga por regalías petroleras y gasíferas.

Además, la situación geográfica de la provincia también conspira porque los 1.600 kilómetros que nos separa de la Capital Federal, hace que los fletes tengan un valor significativo. Como un ejemplo más, Salta tiene, además de la coparticipación federal, su principal recurso en el cobro de los ingresos brutos. Nuestra vecina Jujuy está en peor situación, ya que aporta apenas el 0,6% del PBI nacional.

Nuestro país y el mundo

El 20% de la población mundial se queda con el 85% de la riqueza. Mientras que los desposeídos y olvidados, especialmente Africa y el sudeste asiático, que representan el 60% de la población, se quedan con el 4% de la torta.

La Argentina fue en la década del 30 la octava potencia económica del mundo. Hoy, con un PBI anual de 726 mil millones, alcanza el puesto 21 entre los 198 países del orbe.

Sobre los US$ 75 billones de producción anual en el mundo, Estados Unidos aporta más de 15 y China 11. Ahora India, en tercer lugar, suma 4,5; Japón 4,4; Alemania 3,1; Rusia 2,4 y Brasil 2,3 billones de dólares. Como se advierte, estas siete potencias producen más de la mitad del PBI del planeta.

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