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Con una particular expresión de repudio, vecinos del barrio Los Olivos que sufren los malos olores producto del derrame de aguas cloacales, vaciaron dos botellas de plástico que contenían agua servida sobre la vereda de las oficinas de Aguas del Norte.
La protesta es a consecuencia de los múltiples reclamos realizados sin que haya habido alguna acción para intentar solucionar el problema.
La pérdida puede deberse a la saturación del sistema de cloacas, y este tipo de derrames se repite en por lo menos tres sectores de la ciudad, ”Nos cansamos de pedir que vayan a arreglar la pérdida y nunca fueron; ya van tres semanas, no podemos estar dentro de nuestras casas, el hedor es insoportable. Por esa razón yo quise que ellos sepan por lo que estamos pasando y traje un poco de esa agua” , expresó el vecino Ariel Burgos. “No contamos con las herramientas necesarias para dar una solución”, fue la repuesta recibida por personal de Aguas de Norte