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1 de Julio,  Salta, Centro, Argentina
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“El básquet me otorgó valores y forjó mi carácter”

Lunes, 19 de agosto de 2013 01:53
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Impulsado por la pasión con la que entiende y vive el básquet, Nicolás Casalánguida se coronó por primera vez campeón de la Liga Nacional de Básquetbol (LNB) con Regatas de Corrientes. A los 34 años es uno de los entrenadores más jóvenes en obtener un título junto a Néstor “Che” García y Sergio “Oveja” Hernández.

Desde muy chico pintaba para DT. Las ganas de aprender, los gestos de liderazgo y la insistencia en la materia lo llevaron por un destino casi inevitable. “A los 14 años era monitor de básquet de menores en Gimnasia de Concordia, a los 16 me fui a Estados Unidos, después en Córdoba estudié Educación Física y seguí con el básquet. Siempre con la intención de aprender”, señaló Casalánguida en diálogo con El Tribuno.

Comenzaste muy joven a dirigir, ¿antes habías jugado al básquet?

Sí, en Gimnasia de Comodoro Rivadavia. Desde chico siempre fui un apasionado del juego, fui muy precoz para todo. Dejé de jugar (a los 22 años) y comencé a dirigir. A los 14 era monitor del club de las formativas. Siempre sentí la necesidad de aprender, de crecer en esto que me apasiona. Para eso me capacité, estudié y lo sigo hacien do.

¿Cuándo dirigiste por primera vez un equipo profesional?

Después de estudiar, de viajar siempre por el básquet, me dediqué ciento por ciento a enseñar este deporte. A los 25 fui asistente de Fernando Duró, el técnico que más me marcó en mi carrera. A los 28 años dirigí por primera vez como profesional, arranqué en Gimnasia de Comodoro.

¿Cómo fue dirigir equipos profesionales siendo tan joven?

No fue fácil pero siempre aposté al conocimiento, a la seriedad del trabajo que creí eran las herramientas que tenía que tener para comenzar como entrenador profesional.

¿Qué tiene que tener una persona para triunfar como DT?

Principalmente energía y formación. Eso conlleva otros factores porque si tenés energía también tenés la capacidad de trabajo para aprender, la fuerza de voluntad para exigirte. Después viene la información, con todo lo que fuiste invirtiendo para desarrollarte, llega el conocimiento que junto a la información van formado una plataforma intelectual. Es una profesión muy exigente que requiere de conocimien to.

Si bien no fue fácil, ¿dirigir tan joven te trajo problemas?

No, al contrario, me llenó de satisfacciones. Soy un agradecido al básquetbol, de haber podido crecer y desempeñarme en esta actividad. Me otorgó valores como persona, ha forjado mi carácter. Este deporte me ha otorgado una educación que me permitió desenvolverme como persona dentro de los grupos y poder hacer una actividad que para mi es una vocación realmente. Sé que es un trabajo, siento mucho placer al realizarlo.

¿Cómo te definís como técnico?

Como un entrenador que quiere mejorar todos los días, que busca perfeccionarse tanto en lo humano como en lo basquetbolístico. Que respeta al jugador, a los grupos de trabajo y considera que hay que ir pasando por todas las etapas para cumplir los anhelos individuales y colectivos.

¿Pensás en lo que viene?

Sinceramente no pienso demasiado ni en lo que pasó, ni en lo que puede pasar. Vivo con mucha pasión el día a día, siento que hay que intentar ser mejor todos los días. Me levanto buscando mejorar, no vivo de los recuerdos. Hay que pensar en el presente para que el futuro sea mejor.

¿Te imagináis como DT de la Se lección?

No es algo que pienso.

¿Y sobre la transición, qué opinás?

El recambio es natural y hace un tiempo que se está haciendo. Los argentinos pudimos gozar de 10 años de una camada extraordinaria con el mejor nivel y muy difícil de repetir. Pero soy consciente que hay recursos humanos para formar un nuevo grupo que pelee a nivel internacional.

 Futuro de selección

Por más que lo niegue, en un futuro no muy lejano es el hombre y el nombre indicado para suceder a Julio Lamas. Llegó al equipo nacional de la mano de un grande, el Oveja Sergio Hernández en el 2009 para el Premundial de Puerto Rico. “El me eligió cuando estaba en mi primer temporada con Gimnasia de Comodoro”, cuenta Casalánguida. “Seguimos con Sergio en el Mundial de Turquía 2010, ese año fui entrenador de la selección que jugó el Sudamericano en Colombia y el grupo de chicos que fueron a China y Australia”. Ahora, después de dos años, “Julio (Lamas) decidió que colabore en su proceso”, señaló.
Estuvo al lado de grandes técnicos, aprendió “mucho y de todos”, sostiene. “He tenido la suerte de ser asistente de excelentes entrenadores. Fernando Duró me ha marcado una forma de desenvolverme en el profesionalismo, me dio una gran posibilidad cuando yo no gozaba de una posibilidad concreta. El ha sido muy importante en mi carrera”.
“Sergio Hernández me dio la oportunidad siendo muy joven en la selección, cuando todos se preguntaban por qué me daban tamaña responsabilidad, él creyó y me dio la confianza para estar en ese grupo. Y ahora Julio Lamas me volvió a dar la oportunidad y confió en mí. De todos soy muy agradecido y la mejor forma de serlo es trabajando, en silencio porque considero que cuando soy asistente mi política es trabajar mucho y hablar poco. Ponerme al servicio de lo que necesite el equipo”.

Junto al club El Tribuno

En su paso por Salta Nicolás Casalánguida se reunió con dirigentes de El Tribuno para trabajar en conjunto. En sus pocos momentos de distensión, el último campeón de la LNB dejó las puertas abiertas para dictar un campus el año que viene.
“Mirá si venís siendo bicampeón de la Liga Nacional”, hicieron el comentario en la reunión con el DT de Regatas Corrientes, a lo que Casalánguida sin dudar respondió: “Uuu ojalá, Dios quiera”. En la reunión quedó el compromiso del entrenador de volver el año que viene a fines de mayo, principios de junio para dictar un Campus.
En la zona sur de la ciudad, los verdolagas (como se lo conoce el club El Tribuno) realizaron este año dos eventos importantes: una clínica/campus dictada por Pablo Coleffi, y un campus a cargo de tres entrenadores de Bahía Blanca. Respecto al tiempo que debería durar un campus, Casalánguida consideró que tiene que tener entre cinco y una semana como mínimo.
Una nueva gestión que pone de manifiesto el trabajo serio y a pulmón que realizan en El Tribuno. Otro sueño que intentarán cumplir nada menos que con Casalánguida, para que sus chicos y los del básquet en general puedan disfrutar de sus conocimientos. Anhelos y esperanzas están en danza, el tiempo dirá y confirmará la llegada de otro DT nacional de renombre a la provincia.
 

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