inicia sesión o regístrate.
Para que la ciudad no arda, la gente debe tomar conciencia. Pero no todos los vecinos, sólo aquellos que parecen divertirse provocando incendios en cerros, baldíos y en cualquier lugar donde los pastos secos invaden y ganan espacios.
La tormenta de Santa Rosa se hizo desear y podemos esperar lo peor porque la sequía puede hacer estragos, como el año pasado. La postal de las laderas de cerros 20 de Febrero y San Bernardo envueltas en llamas no es fácil de olvidar, tampoco la de los policías llevando agua en baldes.
Para que eso no vuelva a pasar, le pido a la gente que apaguen los fósforos antes de tirarlos, que no es divertido dañar el ambiente, que entre todos pagaremos las culpas. Pero ojo que no todo es responsabilidad civil: las autoridades deben responder y salir a prevenir, a limpiar los terrenos, a patrullar para capturar a esos malhechores antes de que vuelvan a provocar caos.
La oportunidad es buena para que los bomberos reclamen equipamiento. Para que todos estemos más seguros.
Margarita Taritolay
Ciudad