inicia sesión o regístrate.
El Gobierno salió ayer a exigirle a las automotrices que bajen a niveles de diciembre último los precios de los autos producidos en el país para generar la recuperación de las ventas deprimidas desde enero por el fuerte encarecimiento de todos los modelos.
Kicillof afirmó que el Gobierno será “inflexible” para impedir despidos masivos y reconoció que está “preocupado” por las suspensiones que ya se generaron por acumulación de stock debido a la baja de las ventas.
El pedido lo hizo el ministro de Economía, Axel Kicillof, al referirse sobre la situación de incipiente crisis en la que han caído la industria automotriz y el sector autopartista, con unas 12.000 suspensiones y despidos en puerta que podrían ser masivos.
Según Kicillof, es “absolutamente injustificado” que los precios de los autos producidos en Argentina se muevan según el tipo de cambio porque la devaluación del pesos “solo afectó a una parte de los componentes”.
“Dolarizaron los precios (de los coches) cuando no se les dolarizaron los costos”, sostuvo el funcionario al ser consultado en radio Nacional Rock sobre por qué se dispararon los valores del mercado y cayeron las ventas. En ese sentido, el titular del Palacio de Hacienda exigió a las empresas automotrices “que retrotraigan los precios” a los niveles previos a la fuerte disparada porque de lo contrario “no van a (poder) vender”. “Si ponen precios más accesibles, estoy seguro de que las ventas van a mejorar”, apuntó el funcionario y sobre la crisis laboral en las automotrices dijo que “la prioridad es que no se pierda una sola fuente de trabajo”
Déficit fiscal
La devaluación del peso presionada por el déficit fiscal y la suba del dólar llevó a que se crea un esquema tributario previsible en la coyuntura. Consistió en un aumento del impuesto al automóvil de alta gama que luego, por efecto del mismo esquema impositivo, se fue desplazando a los modelos de menores cuantía.
Eso llevó a un alza generalizada de los valores ofrecidos en los concesionarios con la consiguiente caída de las ventas.
La conjunción del impuestazo para los automotores de alta gama, tras una singular suba de la alícuota de impuestos internos, junto al encarecimiento de las unidades por la devaluación de enero, dado el alto componente de piezas importadas, le dieron un duro golpe al mercado, tras varios años en los que fue batiendo récord de ventas. Los meses de marzo a octubre de 2013 fueron los máximos de la serie para ese período, la comparación de una demanda debilitada con esos picos de actividad amplifica la magnitud del receso del mercado. El acumulado del primer cuatrimestre descendió 18%, al caer en los primeros 4 meses del año a 272.095, comunicó la asociación de concesionarios.
Datos de Adefa
“El mercado continúa mostrando una pronunciada baja, lo que ratifica que los concesionarios deberemos adaptarnos rápidamente a esta nueva realidad, muy diferente a la del pasado año récord”, indicó Abel Bomrad, presidente de Acara.En abril la venta de importados se limitó a 49,6% del total del mercado.Las ventas de autos cayeron en abril el 40 por ciento respecto de igual mes del año pasado, en tanto que la producción disminuyó 21,6 por ciento, según datos de la Asociación de Fábricas de Automotores (Adefa). De acuerdo con la información suministrada por las empresas, basada en datos cuantitativos, el mes pasado se fabricaron 59.165 unidades, en tanto se vendieron en el mercado local 51.346. Por otro lado, las exportaciones subieron 32.479 vehículos un 20,5 por ciento por debajo del volumen registrado en abril 2013 y una suba de 12,8 por ciento respecto de marzo. En el acumulado del primer cuatrimestre, el sector automotor registró una contracción en las principales variables.
“La menor demanda interna del último período, la situación particular por la que atraviesa el principal mercado de exportación,