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Gimnasia y Tiro acumuló una buena cantidad de números, está muy cerca de gritar cartón lleno, pero le falta el más importante: ganar de visitante. El albo tendrá la posibilidad de sumar, ese resto que le falta, el sábado en su visita a Brown de Puerto Madryn, en los play-offs de vuelta que definirá el pase a la siguiente fase.
El equipo de Ragusa cumplió con los objetivos planificados: zafó del descenso y es el único representante salteño que continúa en carrera y en la lucha por llegar a la B Nacional.
Es verdad, el millonario hizo los méritos necesarios -este año- para llegar a donde está, pero la realidad también refleja una pésima campaña que realizó. Ojo, esto no quiere decir que fue el peor, lo de Juventud y Central Norte (descendido) fue lamentable.
En la fase regular, de once partidos jugados fuera de casa, el albo igualó en cuatro oportunidades y perdió en siete. De 33 puntos en juego solo sumó 4, dejando en evidencia la pobre campaña con un 12,12 % de efectividad. Las ganancias de puntos incrementaron en la reválida para Gimnasia, que fue donde el equipo de Ragusa se afianzó y logró clasificar a octavos de final por el segundo ascenso.
Jugó fuera de Salta en cuatro ocasiones, igualó en dos y perdió las restantes, sumando 16,66 % de eficacia.
No fueron los puntos esperados pero se mejoró.
Uno de los partidos más emotivos y que más cerca estuvo de ganar el albo fue en la primera fecha de la reválida frente a Maipú de Mendoza (2-2). En esa oportunidad Leandro Zárate marcó en dos oportunidades.
En las estadísticas hay que hacer un punto y aparte desde que asumió Salvador Ragusa como técnico. Si bien el rosarino no pudo ganar de visitante, es uno de los grandes responsable de catapultar a Gimnasia.
El buen momento que atraviesa el club de la Vicente López invita a soñar y porque no a despojase del karma y saborear los primeros 3 puntos fuera de casa. Un empate en cero no es para nada despreciable porque con la ventaja que sacó en el partido de ida el millonario (ganó 2 a 1) le alcanza para decir presente en cuartos de final.
El Bocha quedó out para Brown
Después de tanta incertidumbre, Federico Rodríguez respira con mayor tranquilidad. La lesión que sufrió el defensor albo el domingo pasado frente a Brown de Madryn fue menos grave de lo que se pensaba. El susto pasó, ya que los estudios que se realizó el Bocha ayer determinaron que solo se trata de una fuerte distensión en abductor en su pierna derecha.
Rodríguez quedó descartado para jugar la revancha en Chubut, pero en caso que Gimnasia pase a la siguiente fase el ex-Comercio estaría en condiciones de jugar el primer choque de cuartos de final. Diego Guidi será el encargado de reemplazar al Bocha en defensa.